El proyecto de la Eco-city con campo de golf es uno de los más polémicos que el Ayuntamiento de Tudela tiene entre manos en la actualidad. Mientras el expediente sigue adelante, muchos colectivos sociales han mostrado su oposición a la actuación prevista, e incluso arquitectos y urbanistas de la Ribera y hasta técnicos del propio Gobierno de Navarra han hecho pública su falta de sintonía con la misma.

El Ayuntamiento de Tudela pretende urbanizar un área de alrededor de 1.300.000 m2 de terreno comunal situada en la carretera de Corella (junto al canal de Lodosa), a más de tres kilómetros del suelo urbano o urbanizable residencial más cercano, con el objetivo de construir 900 viviendas de alta eficiencia energética y un campo de golf de dieciocho hoyos. El presupuesto total se estima sobre 11.300.000 €, con una aportación municipal de alrededor de 8.000.000 € y una subvención prevista de 4.400.000 €.

Desde Ecologistas en Acción de la Ribera ya hemos manifestado repetidamente nuestro total desacuerdo con la actuación. Creemos que este nuevo barrio es innecesario y poco o nada sostenible, además de un auténtico despropósito desde el punto de vista urbanístico, ya que al tratarse de un núcleo residencial separado del casco urbano, va a generar un gran número de desplazamientos motorizados y no va a integrarse con la ciudad existente, sino que va a competir con ella en cuanto a necesidad de inversiones, servicios y mantenimiento públicos.

Durante el año pasado se han producido dos circunstancias que a nuestro modo de ver aportan nuevos argumentos al debate. Se trata de la aprobación definitiva de una urbanización con campo de golf en Fontellas, y de la exposición pública de la Estrategia y Modelo de Ocupación Territorial de Tudela:

1.- En abril el Gobierno de Navarra aprobó definitivamente el Plan Sectorial de Incidencia Supramunicipal para la construcción de una urbanización de 730 viviendas con un campo de golf de dieciocho hoyos en el Cerro de Valpertuna, en Fontellas. Se trata de un planteamiento urbanístico similar a la eco-city, situado a diez kilómetros escasos de la misma (prácticamente a la misma distancia que ella del centro de Tudela) y para nosotros es evidente que, con el consumo de agua y el impacto que genera la implantación de un campo de golf en la Ribera de Navarra, pensar en dos campos tan cercanos es algo completamente absurdo, tanto desde el punto de vista ambiental, como desde el social y el económico.

2.- También en abril, el Ayuntamiento de Tudela aprobó inicialmente la Estrategia y Modelo de Ocupación Territorial (EMOT) de Tudela, documento de gran importancia para la ciudad puesto que en él se plantean las bases sobre las que se apoyará el futuro Plan Urbanístico Municipal. En los análisis de la EMOT se nos presenta a la eco-city como parte de la ciudad consolidada, pero en la propuesta queda más que claro que ni siquiera cuando Tudela tenga los más de 50.000 habitantes que se prevén, el nuevo barrio estará adecuadamente integrado en la trama urbana de la ciudad.

Por otra parte, en un periódico regional hemos leído (escrito por una parlamentaria foral ribera) que el antiguo concejal de promoción industrial del Ayuntamiento defendía en su día en comisión de urbanismo la bondad del proyecto de la eco-city con los argumentos de la especulación. Parece ser que se habló de nueve millones de euros de ganancia municipal, aportando suelo rústico comunal que no vale casi nada y recibiendo a cambio un campo de golf y un hotel. ¿Dónde quedan la razón de ser y los auténticos fines del urbanismo, que son ordenar y equilibrar la ciudad, dotar de vivienda, espacios públicos y servicios básicos a todos los ciudadanos…?

Hay que señalar también que todos los partidos políticos de la oposición municipal y otros muchos colectivos se han posicionado en contra de la actuación. Además hemos sabido que un grupo de arquitectos entregó al Ayuntamiento un documento en el que se hace ver lo insostenible del planteamiento y se insiste en lo inadecuado del mismo desde el punto de vista urbanístico. Asimismo la EMOT está siendo contestada por ciudadanos y técnicos, entre otras cosas por asumir el proyecto de la eco-city sin analizar su necesidad ni su conveniencia para la ciudad en su conjunto.

A día de hoy, mientras el expediente sigue adelante con su tramitación administrativa, nos encontramos con que técnicos y hasta responsables políticos del Ayuntamiento nos reconocen en privado que la eco-city no debería hacerse. Incluso técnicos de Ordenación del Territorio del Gobierno de Navarra han manifestado públicamente en Tudela que el proyecto es más que cuestionable y que no les agrada en absoluto. En consecuencia nos preguntamos: ¿HASTA CUÁNDO VA A SEGUIR EL AYTO. DE TUDELA ESPECULANDO CON LA ECO-CITY? ¿CUÁNDO VA A RETIRAR EL PROYECTO POR INNECESARIO, INSOSTENIBLE Y ABSURDO?

Rafa Sánchez Coordinador de Ecologistas en Acción de Navarra