La Comisión de Peticiones del Parlamento europeo (PE) discute una petición relativa a la M501. Ecologistas en Acción y Sierra Oeste desarrollo S.O.S.tenible exigen a los eurodiputados que sancionen tanto el desprecio de la Comunidad de Madrid por la legislación ambiental comunitaria, como la incomprensible actitud permisiva del ejecutivo comunitario.

El 1 de abril por la tarde la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo (PE) discute una queja relativa a la M-501. Ecologistas en Acción y Sierra Oeste desarrollo S.O.S.tenible consideran que esta institución, elegida directamente por los ciudadanos europeos, tiene la obligación moral de mostrarse firme en la defensa de los ecosistemas europeos y la integridad de la red Natura 2000, vulnerada sin pudor por el ejecutivo de Esperanza Aguirre al ejecutar la conversión en autovía de la carretera M501, en una de las zonas mediterráneas mejor conservadas de Europa, ignorando todos las opiniones expertas contrarias y saltándose los procedimientos.

Esta política de hechos consumados del ejecutivo madrileño, le ha llevado a proponer a posteriori un acuerdo a la Comisión Europea, una vez que la normativa ambiental europea ya estaba infringida. El PE tiene la responsabilidad de dejarle claro a la Comunidad de Madrid (CM) que Bruselas no va a tolerar esta actitud de desprecio a la legislación ambiental. De lo contrario, la CM habrá aprendido para futuros proyectos la lección de que se puede construir primero y evaluar después.

Igualmente el PE debe ejercer su papel de control sobre la Comisión Europea. Tras haber anunciado la presentación de una demanda ante el Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas (TJCE), la Comisión Europea aceptó inusitadamente el acuerdo de realizar una evaluación ambiental ex post. Esta actitud, además de comprometer el efecto útil de las directivas de impacto ambiental y naturaleza, y ser contrario a la jurisprudencia del propio TJCE, sienta un desastroso precedente en la defensa ambiental, pues cualquier administración europea podría seguir los pasos de la CM, amparándose en la benevolencia con que está siendo tratada.

La Comisión Europea se ha visto corregida por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), que dictó recientemente una sentencia que declaraba nulo de pleno derecho el acto de aprobación del proyecto, y obligaba a la restauración del espacio a su estado original. La Comunidad de Madrid ha presentado recurso contra esta sentencia alegando el acuerdo al que ha llegado con la Comisión Europea. Para Ecologistas en Acción y Sierra Oeste desarrollo S.O.S.tenible, este acuerdo no puede de ninguna forma reparar la infracción cometida, y de ser aceptado convertirá a la Comisión Europea en el principal responsable de que la Comunidad de Madrid no sea sancionada y apercibida por la justicia. Por ello solicitan al PE que requieran de la Comisión que continúe con el proceso ante el TJCE, para ejercer de forma creíble su papel de guardiana del cumplimiento de la legislación ambiental.

Además el PE debe presionar a la CE para que solicite al alto tribunal la paralización cautelar de las obras, ahora que aun no han terminado. La Comisión Europea esgrime como razón para haber aceptado dicho acuerdo con la CM la buena voluntad del ejecutivo de Aguirre basada en un reconocimiento de la infracción cometida. Sin embargo, en ningún momento ese acuerdo contempla como condición sine qua non la paralización inmediata de las obras para corregir lo que aun fuera corregible. Esto demuestra, por un lado, la falta de credibilidad de la CM, que en los medios de comunicación alardea de no haber infringido la normativa en ningún momento, y por otro la escasa voluntad por parte de la Comisión Europea, de velar por la correcta aplicación del derecho comunitario, abusando de sus poderes discrecionales.