Tras las últimas declaraciones del Ayuntamiento (red de carriles bici, “fiesta de la bicicleta”), Logroño en Bici- Ecologistas en Acción como usuarios de la bicicleta como transporte, ha decidido asumir su responsabilidad ciudadana y con esta nota inicia una evaluación continua a la acción –no a las promesas- del Consistorio en materia de movilidad.
Logroño en Bici celebra las promesas de carriles bici en el interior de Logroño y reconoce una evolución positiva del actual ayuntamiento en su relación con el colectivo de ciclistas urbanos. Pero frente a los hechos, LEB denuncia el continuismo en movilidad urbana frente a la anterior corporación:

1. El actual modelo de movilidad urbana y el papel que éste atribuye a la bicicleta la consolidan como un mero instrumento de ocio.

2. Hasta la fecha, el Ayuntamiento no ha cumplido sus promesas electorales en materia de movilidad urbana y ciclovías. Falta un plan global de movilidad sostenible, interviniéndose con pequeñas actuaciones inconexas sin una estrategia global y un debate público.

3. Las intervenciones realizadas (excepto instalación de aparacabicis) mantienen la bicicleta como vehículo de esparcimiento dominical y se han aprovechado de su buena imagen para el autobombo:
- La “Fiesta de la bici” celebró la bicicleta exclusivamente como elemento de ocio, obviando su papel como transporte también urbano y las declaraciones en prensa colaterales reafirman una vez más la política continuista respecto a los Itinerarios periféricos “Carriles bici-ocio”
- No hay evidencias de planificación para la bicicleta en los nuevos desarrollos urbanísticos, la falta esta perspectiva en las áreas suburbanas o periféricas en crecimiento (polígonos industriales, barrios exteriores o localidades limítrofes) consolida el problema.
- Inadecuada distribución y horario restrictivo del servicio público de alquiler Logrobici, que unido a su más que deficiente mantenimiento desincentiva al usuario más que promover un uso urbano de la bicicleta y aporta una mala imagen al visitante.
- Incipiente pero adecuada instalación de aparcabicis de diseño apropiado y correcta ubicación en la ciudad. A pesar de ello, numerosos aparcabicis “dobla-ruedas” persisten en centros oficiales y edificios públicos.

4. Permanece inmutable el principio de que el automóvil es intocable por encima de los ciudadanos (dobles filas, velocidades máximas rebasadas continuamente, incapacidad de suprimir siquiera un mínimo de plazas de estacionamiento en aras de carriles bici eficientes…), confrontando a ciclistas y peatones con trazados sobre aceras, restando espacio a la convivencia y nunca al vehículo a motor.

De nada sirve fomentar el uso de la bici si sus usuarios no se sienten seguros en las calles. Hay que incorporar medidas específicas que resten peligrosidad al tráfico y proporcionen seguridad tanto a peatones como a ciclistas que ya circulan diariamente por la ciudad.

La bicicleta continúa considerándose sólo un elemento “florero” para mejorar la imagen política y dotar de un barniz progresista a las acciones, pero no existe una apuesta decidida por su importancia como medio de transporte urbano y sostenible.

Logroño en Bici-Ecologistas en Acción continúa su colaboración con el Ayuntamiento, transmitiendo las propuestas y necesidades del colectivo de ciclistas urbanos. Lo que no excluye mostrar públicamente su opinión –como en este caso- acerca de la evolución y ejecución de las medidas en cuestión de movilidad urbana.