El plan subregional por el que se ordena el territorio de toda la zona del levante de la provincia de Almería, que corresponde desde Pulpí hasta Carboneras, se aprobó de forma definitiva el pasado 23 de Julio en el Consejo Andaluz del Territorio. Desde la Federación de Ecologistas en Acción de Almería, Asociación de Amigos del Parque y Grupo Ecologista Mediterráneo realizamos alegaciones al plan en el periodo de información publica, mostrando nuestra preocupación por ciertos aspectos que se recogían en el plan.

Dichas alegaciones por parte de los grupos ecologistas, no han sido asumidas por la Junta de Andalucía, por lo tanto el voto de la Federación Andaluza de Ecologistas en Acción en el Consejo fue contrario al plan, por entender que el plan de ordenación no es un plan sostenible y consecuente con los objetivos planteados por el propio POTA y la Agenda XXI. Por ello el plan sigue apostando por o un modelo de desarrollo insostenible.

Nos pareció positivo, que después de 10 años de retraso se tramitara un plan de ordenación del territorio tan necesario para ordenar de forma racional toda la zona del Levante Almeriense, una zona con gran valor medioambiental en el litoral e interior y con un gran desarrollo de una actividad económica basada en el turismo y la agricultura.

Por ello se ha desaprovechado una oportunidad histórica, para dotar al levante almeriense de un plan de ordenación del territorio que preserve los valores medioambientales de la zona y cree zonas de oportunidad económica que sean acordes con el desarrollo sostenible.

En el plan se crean dos áreas de oportunidad económica , una gran zona llamada los Llanos, que abarca a varios municipios, creando un núcleo urbano alejado de los núcleos urbanos existentes y ello incrementara un modelo de ciudad disperso, poco sostenible y con un notable l incremento de infraestructuras. Ello no cumple con los objetivos del POTA de apostar por un modelo de ciudad compacto, creando zonas de oportunidad económica dentro de los núcleos urbanos existentes.

La otra apuesta que nos parece una fragante vulneración de la legislación sectorial medioambiental, es el área de oportunidad del Puntazo del Rayo, se crea una zona de desarrollo turístico, en una zona que es de especial protección comunitaria Zona LIC (Lugar de Interés Comunitario), debe de existir una autorización de la Comisión europea, donde se estipule que es respetable con la preservación de los valores medioambientales de la Zona. En la zona también se encuentra el Monte público del Rayo, protegido por sus valores medioambientales, donde no existe un plan de ordenación forestal, que autorice ese tipo de actividades en suelo protegido.

Por ello nos oponemos que se cree esta área de oportunidad en una zona con un gran de protección , incumpliendo con los objetivos establecidos en el propio PORN de Cabo de Gata de regenerar y recuperar los valores del paisaje degradados en la zona del Algarrobico, parece contradictorio crear una zona de uso turístico que no sea sostenible. Se debería de rehabilitar zonas cercanas al núcleo compacto de Carboneras, con un modelo de desarrollo turístico sostenible que respecte los valores medioambientales de la zona.

En el Plan tampoco hay una previsión real de los recursos hídricos de la zona ni el impacto que tendrá el abastecimiento de agua a través de desaladoras. Autorizando la creación de varios campos de golf, cuando la propia Agencia Andaluza del Agua ha reconocido el déficit de agua en la zona del levante.

Relativo a la clasificación de suelo urbanizable en el Litoral, se sigue autorizando suelos que no atienden a necesidades reales de viviendas, apostando por un modelo de ciudad disperso, algo que se reconoce que es un problema que debería ser corregido por el propio plan. No se desclasifican suelos urbanizable que se encuentran en zonas LIC,s como en Turre y Bédar y especialmente toda la clasificación de suelo urbanizable en la playa de Macenas, una zona de especial riqueza biológica y paisajística.

Otra cuestión que nos preocupa es que el plan no contenga un plan de Movilidad, algo tan necesario para garantizar una infraestructura de trasporte publico, algo tan deficitario en la zona del Levante y la inexistencia de una red de carriles bicis en los núcleos urbanos consolidados.

Por ello mostramos nuestro rechazo al reciente plan de ordenación del levante, por considerar que es un plan que sigue apostando por un modelo de ciudad insostenible y dispersa.

Igualmente el Consejo aprobó la modificación al Plan de Ordenación del Poniente de Almerí, en el que se pretende urbanizar toda la bahía de San Miguel en El Ejido.

Ecologistas en Acción se pronunció en contra de esta modificación, pues parece descabellado que el modelo de urbanismo que claramente ha fracasado se pretenda continuar, en una zona en el que todavía existe mucho suelo urbano por desarrollar. Esta modificación recalifica 550 hectáreas de la bahía de San Miguel se quiere construir viviendas para 40.000 personas (14.000 viviendas), tres campos de golf y un canal de remo de 2.5 kms.

Pretende ser la urbanización más importante a nivel turístico del Mediterráneo, en palabras del alcalde de El Ejido. Una vez más la especulación de suelo y prioridades no relacionadas con los intereses de los ciudadanos marcan el desarrollo y planificación de nuestras ciudades y de nuestro territorio.