Ojo con el Guadiana-Ecologistas en Acción de Ayamonte ha decidido otorgar la Zanahoria Vitaminada a Jaime Muntaner ante sus interesado cálculos de crecimiento poblacional de Ayamonte, con los que justifican las actuaciones urbanísticas que presentan en dicho avance. Prever que una población que contaba con 17.402 habitantes en enero de 2003, según datos del Instituto Nacional de Estadística, y que registraba un índice de crecimiento de -0,93% en la última década va pasar a crecer en los próximos diez años a razón de 1000 habitantes por año sólo puede entenderse como coartada para una política de especulación inmobiliaria dirigida a la segunda residencia.

Si a ello añadimos unas propuestas de infraestructuras que no respetan los espacios protegidos, y nuevas urbanizaciones que ocupan marismas y zonas húmedas, no queda más que considerar la tremenda disposición de Jaime Muntaner a renunciar a postulados de desarrollo sostenible y ponerse al servicio del negocio inmobiliario. Algo de lo que ya ha dejado constancia en su paso por otros proyectos realizadas en la Costa del Sol, y en Marbella en concreto.

Por otra parte, la asociación ecologista ayamontina ha decidido premiar con la Linnaria Lamarckii a la Asociación para la Protección del Patrimonio Histórico y Paisajístico de Ayamonte Almacal. Este premio simbólico que hace mención a un endemismo de las dunas de la desembocadura del Guadiana, extinguido ya por la urbanización de su hábitat, ha sido concedido este año a esta asociación ayamontina por su riguroso y documentado trabajo de defensa de nuestro Patrimonio natural y también histórico y paisajístico así como por la valentía en el enfrentamiento con potentes empresas y políticos muy violentos con la que ha afrontado la defensa de la Rodaera del castillo de Ayamonte.

Durante el año 2004 se han sucedido las actuaciones agresivas para este emblemático espacio ayamontino, habiéndose destruido importantes elementos del patrimonio histórico y cultural, así como el hábitat de un importante endemismo vegetal, y arrasado la población de camaleones que habitaba el lugar. Almacal ha desarrollado una importante labor de divulgación de los valores de este patrimonio, así como de gestiones ante diferentes instituciones para intentar impedir la consumación del nuevo asalto contra la identidad histórica ayamontina, tras la destrucción de su castillo en la época franquista. Como entonces, los intereses especuladores apoyados en la complicidad de los dirigentes municipales, y de su alcalde en particular, han primado sobre el interés público, privando a futuras generaciones ayamontinas de su principal hito paisajístico e histórico.