Ecologistas en Acción de La Rioja exige la dimisión de Aranzazu Vallejo y que se depuren las responsabilidades en el caso de los Sotos de Alfaro.

Ecologistas en Acción de La Rioja quiere mostrar públicamente su rechazo a los últimos sucesos acaecidos en la Reserva Natural de los Sotos del Ebro en Alfaro. Y en relación a los mismos, y tras trasladarse al lugar de los hechos, manifestar que la destrucción total de más de 15.000 metros cuadrados de la propia Reserva Natural de los Sotos del Ebro a manos de la familia de la Consejera Vallejo vulnera toda la legislación y es un hecho muy grave que debería de traer aparejada una fuerte y ejemplarizante sanción económica y la dimisión de esta persona, ya que es la máxima responsable de la Consejería tanto en materia de Medio Ambiente, así como de turismo, dos de las áreas a las que más afecta esta actuación.

También hacer hincapié en un aspecto que se ha pasado por alto hasta el momento pero que es de extrema importancia. Cabe preguntarse en relación a la adquisición de terrenos por parte de la familia de la consejera Vallejo, por qué motivo el Gobierno de La Rioja no ha ejercido el derecho de retracto que le otorga la ley a la hora de impedir que un particular (familiar de Vallejo) compre unos terrenos de alto valor ecológico enclavados en el corazón de la Reserva, y con clarísima vocación de soto de ribera. Ya que el Gobierno regional debería de haber comprado estos terrenos, y todavía puede hacerlo, para destinarlos a uso como bosque. En otras ocasiones (Soto de los Americanos en Logroño) si que la consejería ha adquirido este tipo de terrenos, pero no curiosamente en este caso, pese a que este caso sucede en una Reserva Natural de la máxima importancia y protección. ¿Tal vez por ser el comprador la familia Vallejo?.

Pero no solamente Vallejo ha de dimitir por estos hechos, ya de por sí graves, pues los mismos tan solo constituyen la última gota que colma el vaso. Desde su llegada a la consejería de Medio Ambiente sus políticas lejos de favorecer la conservación de la naturaleza lo único que han hecho es perjudicarla y utilizar la Consejería para silenciar voces como las de los movimientos ecologistas, y pervertir el sentido de muchas normativas proteccionistas hasta el punto que necesitaban sus propios intereses y los del partido popular.

Comenzó por eliminar la orden de subvenciones para educación ambiental en un intento fallido de castigar a Ecologistas en Acción y otras ONGs. Prosiguió cambiando la legislación sectorial del suelo para favorecer los intereses de determinados grupos económicos y políticos auspiciando la creación de figuras legales como la declaración de interés supramunicipal . Expulsó de la COTUR a Ecologistas en Acción, para evitar testigos de los manejos urbanisticos que se perpetran en este órgano.

Ha convertido las políticas de medio ambiente que se practicaban antes de su llegada en meros actos de marketing sin ningún otro sentido que el de embaucar y recrearse en su propia demagogia. Es la mayor responsable del desarrollo de proyectos tan oscuros y singulares como la Eco-ciudad de Logroño. Y desde su consejería atenta, por desidia o defensa de intereses ocultos, entre otras cosas contra las especies en peligro de extinción en nuestra Comunidad, las cuales han visto como caducaban sin revisión sus planes especiales de recuperación. Algunas de estas especies en peligro de extinción, como el Sisón, lleven ya 2 años con el plan de recuperación caducado y sin renovar, algo que según nuestra opinión obedece, entre otros factores a la defensa de intereses privados de grandes empresas tanto en el propio Alfaro ( finca de Rihuelo) así como en otras zonas como la Maja (Pradejón).

Lejos de velar por la conservación de la naturaleza esta persona ha demostrado desde su llegada a la Consejería de Medio Ambiente un desprecio absoluto por el medio ambiente y un único objetivo: favorecer los intereses particulares de determinadas personas. Mientras todo esto sucede los espacios naturales más amenazados de La Rioja siguen sin protección efectiva, tal es el caso de las zonas húmedas o las esteparias. Ni tan siquiera la única reserva natural de la Rioja está a salvo de esta Consejera, que incluso autorizó la realización de unas batidas de caza dentro de ese reducido santuario el pasado año, en época de reproducción de especies como la nutria o el visón europeo. Y que decir de las políticas de control de la calidad ambiental, que siguen secuestradas por la defensa de intereses privados. Nada ni nadie frena hasta la fecha a esta persona que ha transformado la consejería en un cortijo.

Por todo ello Ecologistas en Acción de La Rioja solicita la dimisión de esta persona, como única solución posible para que la ética y el sentido común regresen a la gestión del medio ambiente en nuestra Comunidad.