Ecologistas en Acción de Andalucia no asistirá a la firma protocolaria del Acuerdo Andaluz por el Agua que propone la Agencia Andaluza del Agua para el día 3 de febrero en Sevilla.

Ecologistas en Acción agradece la invitación de la Sra. Consejera de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía aunque anuncia que no asistirá al acto en coherencia con su ya explicada negativa a firmar el citado acuerdo.

En el mes pasado, Ecologistas en Acción no firmó el AAA por discrepar claramente con las políticas de aguas y medioambientales que desarrolla la Consejería de Medio Ambiente y que a Ecologistas en Acción le parecen políticas insostenibles:

- No se controla la demanda de agua

- Se siguen realizando informes favorables a PGOUs totalmente insostenibles por sus crecimientos urbanísticos y, por tanto, por su consumo de agua, sin seguir ni las prescripciones de la Agenda 21 ni los del POTA

- Se siguen dando concesiones a campos de golf con agua de acuíferos y ríos

- Se sigue sin controlar las extracciones ilegales; no hay control de aguas subterráneas.

El mapa de los conflictos del agua en Andalucía abarca espacios y problemas de todo orden. Algunos de estos conflictos son el plan de recuperación del río Guadaira, la presa de laminación del río Eliche, el trasvase del río Castril, los proyectos de resorts urbanísticos y golf en diversos municipios de Málaga y su afección a los acuíferos, los informes favorables en materia de aguas a desarrollos urbanísticos sobredimensionados en varios puntos de Andalucía, los azudes de Córdoba y Río Grande, la autorización de vertido de de metales pesados procedentes de la Mina Cobre Las Cruces al río Guadalquivir y las afecciones de esta actividad sobre el acuífero…

Por si fuera, poco las discrepancias de Ecologistas en Acción con la Consejería se multiplicaron con la aprobación de la Ley de medidas tributarias y financieras de impulso a la actividad económica de Andalucía mediante la que la Junta de Andalucía cambió importantes leyes ambientales de manera oscura y fraudulenta, cambios que afectan a la política de aguas y que dejan en entredicho la credibilidad de la Junta de Andalucía respecto a procesos de participación.

Con respecto al propio Acuerdo Andaluz por el Agua, manifestamos entre otros temas:

1.- Ante todo, y en primer lugar, el gran Acuerdo Andaluz por el Agua debe y tiene que ser la revisión de los planes hidrológicos y la adaptación de la Directiva Marco de Aguas (DMA), pasando el que se pretende que firmemos a un segundo plano.

2.- El Acuerdo representa una amnistía absoluta para los usos ilegales del agua, con especial atención al regadío y las captaciones de aguas subterráneas.

3.- No se plantean medidas específicas para limitar las demandas de agua en los nuevos desarrollos urbanísticos, especialmente en los ámbitos con menor disponibilidad de recursos, como el litoral mediterráneo y buena parte de la provincia de Málaga, Granada y Almería.

4.- Las medidas de fiscalidad ecológicas se centran en los usuarios urbanos, indefiniendo la forma en que se tributará a los usos agrarios y especialmente el uso de agrotóxicos.

5.- Elude la mención a destinar los caudales provenientes del ahorro por aumento de la eficiencia y la modernización a la mejora y recuperación del régimen de caudales ecológicos.

6.- Evita la congelación de nuevas concesiones, tanto para recursos subterráneos como superficiales.

Reiteramos que el Acuerdo por el Agua en Andalucía debe ser la revisión de los planes hidrológicos y su transposición a la Directiva Marco de Aguas y este acuerdo es el que deberá dictar la futura Ley Andaluza del Agua. Esta será la que tendrá carácter normativo y vinculante, mientras que del Acuerdo Andaluz por el Agua no es más que una declaración de intenciones.