La «Plataforma Estatal contra la Contaminación Electromagnética» pide una legislación sobre Salud y CEM tras la última asamblea de trabajo, este fin de semana en Madrid, que ha contado con asistencia de organizaciones vecinales, colectivos de afectados y ecologistas de Galicia, Euskadi, Navarra, Comunidad de Madrid, Aragón, Castilla-León, Cataluña, y representantes de Ecologistas en Acción Región Murciana y el apoyo de asociaciones vecinales de Andalucía y de afectados/as de la Comunidad Valenciana.

La «Plataforma Estatal contra la Contaminación Electromagnética» ha realizado este fin de semana una asamblea de trabajo, en la que han participado miembros de Ecologistas en Acción Región Murciana, entre otros muchos asistentes representantes de diferentes colectivos.

En el análisis de situación, la Plataforma ha valorado el impacto negativo que tiene el aumento descontrolado de infraestructuras de telecomunicaciones (antenas estaciones base, radioenlaces, picoantenas, wifi, etc.,) e infraestructuras eléctricas (líneas de alta tensión, subestaciones y transformadores) que supone en la práctica un aumento significativo de la contaminación electromagnética (exposición a campos electromagnéticos) en nuestro país; sin que la normativa estatal, hecha en función de los intereses de las operadoras de telefonía móvil y las empresa eléctricas, haya dado una solución definitiva.

La Plataforma valora como un paso adelante la aprobación, el 2 de abril, por el pleno del Parlamento Europeo de la resolución “Campos electromagnéticos: consideraciones sanitarias” (Informe Ries) por una amplísima mayoría de 559 eurodiputados a favor, 22 en contra y 8 abstenciones. Esta resolución pide que ”se preste especial atención a los efectos biológicos cuando se evalúe el posible impacto sobre la salud de las radiaciones electromagnéticas, especialmente si se tiene en cuenta que algunos estudios han detectado que radiaciones de muy bajo nivel ya tienen efectos muy nocivos”. El informe emplaza a los países europeos, entre ellos el estado español, a revisar la leyes que tienen que ver con las emisiones de campos electromagnéticos de infraestructuras de telecomunicaciones y eléctricas (Ley General de Telecomunicaciones, el Real Decreto 1066/2001 sobre dominio público radioeléctrico y la Ley 54/1997 del Sector Eléctrico), de acuerdo a los criterios de prevención, precaución y principio Alara/Alata “la mínima emisión técnicamente posible”.

La resolución Ries pide también a los estados miembros de la Unión Europea que sigan el ejemplo de Suecia y reconozcan como una discapacidad la hipersensibilidad eléctrica, con el fin de garantizar una protección adecuada e igualdad de oportunidades a las personas que la sufren.

Varias resoluciones de conferencias internacionales de investigadores y científicos independientes sobre campos electromagnéticos como las de Salzburgo (2000), Catania (2002), Benevento (2006), Venecia (2007) y Londres (2007) han reclamado la necesidad de disminuir drásticamente los valores límites de exposición ciudadana a campos electromagnéticos, como así lo han hecho ocho países europeos (entre ellos Italia, Luxemburgo, Bélgica, Suiza, Polonia, etc.).

La plataforma planteó también el inicio de actividades de todos los grupos que la compone para la celebración del Día Mundial Contra la Contaminación Electromagnética, el próximo 24 de junio con la presentación de un Manifiesto en Madrid y otras acciones en las comunidades autónomas.