Múltiples averías se producen en la estación de bombeo de aguas residuales situada en el raso de la estrella, por lo que supone una enorme dejadez, en la conducción de aguas hasta la estación depuradora y su vertido directo a la Ría de Palacio.

Debemos añadir la escasa capacidad de los colectores o potencia en el bombeo, para evacuar el agua procedente de la lluvia, por lo que ésta se mezcla con las aguas negras del saneamiento y ambas terminan derivadas hacia el río sin depurar, produciendo un grave problema ambiental y de salud publica, además del daño paisajístico provocado al realizarse el vertido en una de las zonas mas sensibles, desde el punto de vista turístico como es el entorno de Palacio.

De nada sirven las múltiples denuncias de vecinos y este grupo ecologista ante las diversas administraciones con responsabilidad en el asunto, también el SEPRONA hace las propias, pero nada parece eficaz para detener esta irresponsabilidad cotidiana con la que sus responsables nos obsequian cada poco tiempo.

Ecologistas en Acción de Aranjuez ante la desidia en la resolución del problema por parte de los encargados de solucionarlo por acción (Canal de Isabel II) y los que corresponde denunciarlo, en su deber ante los ciudadanos por omisión (Confederación Hidrográfica del Tajo, Ayuntamiento y Patrimonio Nacional), nos creemos en la necesidad ante próximos vertidos, de formular la denuncia correspondiente ante la Fiscalía Provincial de Medio Ambiente para la incoación del correspondiente procedimiento penal.

El Canal de Isabel II es el organismo dependiente de la CAM encargado y con responsabilidad, de las aguas tanto potables como residuales en la comunidad.
Canal de Isabel II en su cuenta de resultados se enorgullece de generar cuantiosos beneficios, en su gestión a lo largo del año, que dedica inexplicablemente a otros menesteres alejados de la propia administración del agua en la región. Reconocen perdidas por las tuberías del 20%, en los procesos de aducción y distribución del agua potable, hasta las tomas de los propios edificios, donde acaba su responsabilidad. A tenor de lo que pasa en Aranjuez con las aguas pluviales y negras referidas en párrafos anteriores, si extrapolamos este pésimo funcionamiento a otras ciudades, como probablemente ocurra, estaremos en condiciones de dudar y mucho de la buena gestión que nos venden en su propaganda oficial.

Dados los rendimientos económicos que justifica este organismo público, pasara a privado (49% en su accionariado), para repartirse tan preciado botín. Ante la próxima llegada del agua del río Tajo a nuestros grifos ¿podemos confiar en la eficiente depuración de sus contaminadas y duras aguas? Una óptima prestación de servicios, también incluye poner en marcha la nueva depuradora de la Montaña, recogiendo las aguas del Cortijo, que actualmente vierten al Tajo, sin apenas depurar, encontrándose la pequeña e insuficiente EDAR junto a un parque infantil.