El derribo de los árboles se debe al inicio de las obras de adecuación de la estación de San Feliz, que FEVE promueve para convertirla en estación término, o final de trayecto, de los trenes regionales y turísticos que actualmente recorren la línea León-Bilbao y que con la implantación del tranvía en León, quedarán en San Feliz.

Ecologistas en Acción ha podido saber que FEVE ni siquiera había comunicado la intención de eliminar los árboles al Ayuntamiento de Garrafe de Torío, ni le había entregado la documentación de un proyecto que en todo caso requerirá modificación de las normas urbanísticas vigentes y aprobación plenaria.

Al igual que en León, con el derribo del bar de la estación, FEVE impone los hechos consumados, interviniendo en el dominio público del ferrocarril como si estuviera en el rancho privado de una república bananera; prescindiendo de la Constitución Española -que asegura la Autonomía Local- , del elenco legislativo de aplicación a un proyecto tan complejo y hasta de su propia normativa sectorial, la Ley del Sector Ferroviario (LSF) que FEVE esgrime para justificar sus actuaciones por vía de hecho.

Decimos esto porque las obras del tranvía en León, -infraestructura que alterará el funcionamiento de la línea de FEVE León –Bilbao-, se están iniciando sin que el Ministerio de Fomento haya tramitado el expediente de exclusión de los kilómetros de la Red Ferroviaria de Interés General que quedarán afectados (art.4 LSF) , y sin que sepamos que se haya dado trámite al estudio informativo que, también, a instancias del Ministerio de Fomento, debe aprobarse finalmente en Consejo de Ministros, siempre que cuente con el respaldo de la Junta de Castilla y León y haya sido sometido previamente a evaluación de impacto ambiental (art. 5 LSF).

El proyecto en su conjunto ni siquiera se ha presentado a la opinión pública por sus promotores. Se ampara en un Convenio Marco – firmado el 6 de febrero de 2010 por el Ayuntamiento de León, FEVE y el Ministerio de Fomento- , que es nulo de pleno derecho, ya que contempla la cesión de aprovechamientos urbanísticos del Ayuntamiento de León (que forman parte del patrimonio público de suelo) a FEVE para que FEVE ejecute el proyecto del tranvía, no estando prevista esta modalidad de transporte en el PGOU de León.

Aunque el Convenio no es firme, -no se ha publicado en ningún boletín oficial- FEVE lo está desarrollando con la licitación y adjudicación de obras, y lo que es más grave, ejecutándolas por vía de hecho: el día 23 de agosto en León, demoliendo el bar “El Hullero” y hoy en San Feliz derribando los 10 plataneros de sombra que desde hace más de medio siglo prestaban sus servicios ambientales a los trabajadores y viajeros de FEVE sin pedir nada a cambio.

Para Ecologistas en Acción de León los hechos denunciados son mas bien propios de Atila y sus huestes –no en vano el ahora presidente de FEVE ya fue galardonado en 2004 por la Federación de Asociaciones de Ecologistas en Acción de Castilla y León con el premio “Caballo de Atila” a la peor conducta ambiental-

Esta asociación denunciará a los responsables ante los Juzgados de Instrucción de León por presuntos delitos urbanísticos y contra el medio ambiente.