Ecologistas en Acción ha presentado un Recurso de Alzada, ante el Consejero de Agricultura y Agua, solicitando la anulación de la autorización ambiental integrada otorgada por dicha Consejería al proyecto de Planta de Incineración de residuos tóxicos y peligrosos que Befesa Valorización SL ha solicitado en el Valle de Escombreras.

En el proyecto de planta incineradora de Escombreras se quemarán aceites contaminados, disolventes, barnices, pinturas, material electrónico, plaguicidas y pesticidas, medicamentos, lodos inorgánicos, etc.; sustancias que destacan por su toxicidad y peligrosidad. El volumen que la planta pretende quemar se cifra en un total de 36.000 toneladas anuales de residuos peligrosos líquidos y sólidos.

Las incineradoras de residuos tóxicos y peligrosos emiten a la atmósfera muchos tipos de contaminantes entre los que se encuentran: partículas; metales pesados como mercurio, cromo, cadmio, arsénico, plomo y berilio; hidrocarburos aromáticos policíclicos (HAPs); bencenos clorados; naftalenos policlorados; compuestos orgánicos volátiles (COVs); gases ácidos como óxidos de azufre; dióxidos de nitrógeno y ácido clorhídrico, y gases de efecto invernadero como dióxido de carbono.

Otro elemento importante es el efecto atractor de residuos tóxicos y peligrosos que se generan en otras comunidades autónomas con criterios mucho más estrictos como Navarra o Euskadi y otras regiones, convirtiendo a Escombreras en el sumidero de los residuos tóxicos y peligrosos de otras comunidades. Para Ecologistas en Acción un principio básico de precaución y gestión sostenible de los residuos; es que éstos sean gestionados y tratados en el lugar en el que se producen.

La organización destaca que en el proceso de quema de residuos se forman nuevos compuestos tóxicos (como dioxinas y furanos). En relación a estos contaminantes, precisamente este verano asistíamos al cierre de una caldera de incineración de una planta química en Alcantarilla por los Servicios de Inspección y Vigilancia Ambiental de la Consejería de Agricultura y Agua, por superar los valores límite de emisión de dioxinas y furanos, contaminantes muy peligrosos para la salud pública. También el proceso de incineración PCBs y hexaclorobenceno.

Todos estos compuestos forman parte de la familia de compuestos orgánicos persistentes (COP) que son contaminantes persistentes que se acumulan en los tejidos grasos, lo que puede suponer un grave riesgo para las personas si estamos expuestos a estos contaminantes, además del daño para el medio ambiente.

Para Ecologistas en Acción, si se implanta la planta de incineración de residuos tóxicos y peligrosos en Escombreras, supondrá un cambio cuantitativo y cualitativo en el deterioro de la calidad del aire, agravando los niveles de contaminación existentes en una zona ya de por si muy castigada por la pérdida de calidad del aire.

Ecologistas en Acción denuncia que la administración regional y local han permanecido pasivas y condescendientes ante este proyecto de instalación. Esta organización ha solicitado que se deniegue la autorización ambiental integrada al proyecto y propone renunciar a determinadas tecnologías de tratamiento para los residuos como la incineración de residuos tóxicos y peligrosos, por los graves impactos sobre la salud pública y la calidad del aire que supone.