PDF - 403.7 KB
Banderas Negras Región de Murcia 2011

Ecologistas en Acción presenta su informe anual Banderas Negras 2011 en el que se analiza la costa de la Región de Murcia y donde se puede consultar cuáles son los problemas que agreden al litoral y lo han llevado al caos costero.

Ecologistas en Acción Región Murciana, como movimiento social que aboga por una conservación y protección del medio ambiente viene analizando desde hace 12 años el estado de la costa y las presiones a las que se ve sometida la frágil franja litoral. Este año se otorgan 29 Banderas Negras y 84 Puntos Negros.

El litoral sufre agresiones desde distintos flancos. Por un lado tenemos el Urbanismo, entendido desde los gobernantes como una moneda de cambio, que se ha ido comiendo poco a poco nuestros recursos naturales y paisajes costeros. La desplanificación urbanística nos muestra zonas como La Manga del Mar Menor, claro ejemplo de irracionalidad y crecimiento sin miramientos. El urbanismo en este caso supera con creces la capacidad de carga y ha ido poco a poco desnaturalizando la laguna salada del Mar Menor, hasta convertirla en un sumidero de vertidos procedentes del campo de Cartagena y de la deficiencia o inexistencia de la depuración de aguas residuales.

Lejos de cambiar con el modelo de desarrollo que nos ha llevado a la crisis, se sigue apostando por proyectos como el de Novo Carthago, que supondría la degradación final del Mar Menor, urbanizaciones como la pretendida en Cala Reona y se pone especial énfasis en sacar adelante la mal llamada Actuación de Interés Regional (AIR) Marina de Cope, que supondría la destrucción de uno de los tramos más largos de costa virgen y de mayor diversidad tanto terrestre como marina.

Los vertidos de aguas residuales son un continuo en nuestras playas. Su causa: el aumento de población en época estival, derivado del turismo depredador de sol y playa. Las Estaciones depuradoras de aguas residuales se ven desbordadas por el volumen de aguas que reciben en verano, y vierten sus aguas al mar, con el impacto que con lleva sobre los ecosistemas y sobre la calidad de las aguas. Estos vertidos se producen principalmente en el Mar Menor, provenientes de las EDARs y acompañados de nitratos y fosfatos del campo de Cartagena. En el Mediterráneo destacamos el emisario submarino de Cala Reona.

La proliferación de puertos innecesarios suma degradación a la costa, ya que, a pesar de ser infraestructuras sumamente impactantes, se siguen proyectando actuaciones como la Terminal de Contenderos del Gorguel y su Zona de Actividades Logísticas, que, abanderada por la Autoridad Portuaria de Cartagena, amenaza con destruir una zona con altos valores ecológicos, culturales, geológicos y mineros. Y todo obviando la oposición de diversos colectivos sociales y ambientales.

Toda esta suma de presiones, que causa y consecuencia, desemboca en grandes inversiones de dinero público, que año tras año van poniendo parches en forma de regeneraciones de playas, paseos marítimos y diversas obras en costas. Esta inversión supone un lastre económico a la sociedad, que lejos de solucionar el problema de raíz, se usan para paliar los daños que unos pocos han generado, obteniendo beneficio por ello.

Debido a la necesidad de dar a conocer este análisis, nace el informe de Banderas Negras, este año titulado “Esto es una barbaridad”, como documento divulgativo y de denuncia, donde se muestra la degradación y destrucción que se ha producido en la costa a lo largo de todos estos años.

Las Administraciones Públicas y los gobernantes políticos, lejos de cumplir con la Constitución en diversas materias y con su deber para con el pueblo, se pasean de la mano de especuladores, corruptos e intereses privados y financieros, que buscan únicamente su beneficio personal. Y todo, a costa de la conservación del medio ambiente y del incumplimiento sistemático de las Leyes, que son modificadas al antojo de cada cual y en función del interés económico, obviando intencionadamente el social.