Al ataque al que está siendo sometido el río Ésera en el tramo entre Campo y Graus, hay que añadir estos últimos días el de la extracción de áridos solicitada por el propio Ayuntamiento de Perarrúa.

Si las solicitudes de aprovechamientos hidroeléctricos está siendo cuestionadas y alegadas por Ecologistas en Acción de Ribagorza, no podía ser menos la actuación a todas luces lesiva para la salud del río, como ecosistema vivo, que se esta llevando a cabo en el cauce del Ésera a su paso por la localidad.

En un principio vecinos y asociaciones dieron un voto de confianza al ayuntamiento para lo que parecía una actuación en la margen derecha del río encaminada a recuperar el camino desde la calle mayor a Besians, pero ahora hemos podido confirmar que se trata pura y llanamente de otro ataque directo al río y al pueblo de Perarrúa.

Es igualmente denunciable la actuación de ambas administraciones, local e hidrológica, que manifiestan una lamentable opacidad en la información. El ayuntamiento no ha informado convenientemente a sus vecinos y, por otro lado, dirigirse a la Confederación Hidrográfica del Ebro es perderse en una maraña de conversaciones inútiles en el teléfono sordo del Jefe de Cauces del Área de Gestión Medioambiental de la CHE.

Desde Ecologistas en Acción de Ribagorza exigimos a ambas administraciones informen ampliamente sobre las medidas que se piensan tomar para que el río pueda recuperarse de la agresión que supone la alteración a que está siendo sometido. Igualmente es exigible la acción de policía que la CHE debería llevar acabo en le cumplimiento de la Directiva Marco de Aguas de la Comisión Europea.