Ante la repetición del fracaso de las negociaciones sobre cambio climático de Copenhague y Cancún, ahora en la COP17 de Durban, Ecologistas en Acción denuncia que “el grave bloqueo de EE UU en las negociaciones y la propuesta vacía de la UE para comprometerse a un segundo periodo de compromisos del Protocolo de Kioto llevará la cumbre a una declaración política de intenciones, sin carácter legal vinculante, y con cifras de reducciones de emisiones absolutamente insuficientes que llevarán al mundo a un aumento de la temperatura media global de entre 3,5 y 5°C”.

Durante su intervención en la plenaria de esta mañana, Nnimmo Bassey,
activista contra la explotación petrolera en Nigeria, en representación de
la red internacional “Climate Justice Now!” (Justicia Climática Ya)
pregunta a los gobiernos: “¿No se avergüenzan de su egoísta indiferencia
por la creación de esta crisis?” Y añadió: “El acuerdo que se está
gestando aquí significa más años de inactividad. Las consecuencias de esto
incinerará África y causará devastación en todo el mundo. Pero ninguna
nación es inmune a esta crisis planetaria.”

Con la Convención Marco de NN UU y el mandato de Bali (2007) ya existía la
hoja de ruta para negociar un marco legal vinculante, con un segundo
periodo de compromisos del Protocolo de Kioto, un nivel de reducción de
emisiones ambicioso y en base del principio de “responsabilidades comunes
pero diferenciadas”. Pero, las naciones ricas, están tratando de renegar
de sus compromisos de pagar su deuda climática. En su lugar, están
consolidando las falsas soluciones como mercados de carbono, la tecnología
peligrosa de la captura y el almacenamiento de carbono (como MDL), el
acaparamiento de tierras y la privatización de bosques (REDD+), la
inclusión de la agricultura en los mercados de carbono, y torciendo el
brazo a los países vulnerables con ofertas insignificantes de fondos
económicos.

El aumento de las emisiones y las temperaturas récord en 2010, son la
consecuencia de años de inacción, distracción y retraso de la mayoría de
los países industrializados, entre ellos la UE, que ha usado los
mecanismos de flexibilidad del Protocolo de Kioto para “compensar”
(offsetting) sus emisiones en vez de cerrar centrales térmicas de carbón o
reducir el transporte motorizado.

Podrán anunciar un “éxito” al final de la cumbre, pero los gobiernos nos
han fallado una vez más. Sólo están interesados en rescatar los bancos y
el sistema financiero.

Los gobiernos de la UE sólo representan a los intereses económicos y
comerciales de las industrias contaminantes, de los mercados financieros y
de las corporaciones del sector de servicios. La presencia del lobby
corporativo y la toma de la COP17 por las multinacionales petroleras y
energéticas nos muestra la verdadera agenda de esta cumbre.