Ecologistas en Acción de Aragón reclama en sus alegaciones al Plan Hidrológico de la Cuenca del Ebro, un régimen de caudales ambientales para conseguir el buen estado ecológico de los ríos.

En la actualidad existen numerosos tramos donde no se cumplen los caudales ambientales definidos por el anterior Plan Hidrológico del Ebro; situación que no ha sido reflejada en la descripción general de la demarcación; singularmente en puntos donde dos de los grandes sistemas de riego y algunos usos hidroeléctricos hacen unas de las detracciones mas importantes de la Cuenca del Ebro. Es el caso del Cinca y Ésera aguas abajo de los pantanos de El Grado y Barasona, donde la falta de caudales ocasiona graves impactos ambientales como, el deterioro de bosques de ribera en las zonas donde los caudales son exiguos, graves impactos a las especies amenazadas que habitan este ecosistemas, aumento de la contaminación tanto de aguas residuales como de contaminación difusa debido a falta de efecto de dilución, encajado de cauce, etc.

Muchos de estos tramos como el caso del Cinca, están declarados como Lugares de Importancia Comunitaria, por lo que son zonas protegidas de acuerdo a la descripción del Plan Hidrológico del Ebro. Sin embargo la propuesta de caudales en el borrador de plan presentado, no solo no resuelven este problema, sino que en muchos casos la empeora, por ejemplo proponiendo, para el Cinca aguas abajo de los pantanos, caudales de entre 0,5 m3/seg. (tramo de 6 km. hasta el Ésera) y los 6 m3/seg., cuando numeroso estudios proponen entre 10 y 30 m3/seg (entre otros el de un grupo interdisciplinar realizado para el Centro de Desarrollo del Somontano y financiado con fondos Leader II)

Con los caudales propuestos se va a incumplir «los objetivos ambientales en 2015» en muchos más casos de los reflejados en la evaluación del PHE, agravándose el deterioro de los hábitats naturales y de los hábitats de especies, incumpliendo no solo la Directiva Marco de Agua, también el Reglamento de la Planificación Hidrológica que, marca como objetivo de la Planificación hidrológica el conseguir el buen estado y la adecuada protección del dominio público hidráulico y de las aguas y de guiarse por criterios de sostenibilidad en el uso del agua (¿Es sostenible detraer 80 m3 en el Canal del Cinca y dejar bajar por el río menos de 1 m3?) ,

Por otro lado Ecologistas en Acción denuncia que no se han realizado estudios que identifiquen las necesidades de las especies y los ecosistemas ribereños protegidos de la Red Natura 2000 y se lamenta de la escasez de reservas fluviales propuestas, siempre en los tramos de los nacimientos de ríos de montaña (salvo el caso del Veral) cuando existen todavía bastantes espacios fluviales con escasa intervención humana que merecerían una catalogación, como extensos tramos de los ríos Guarga, Alcanadre, Isábena o Ara por citar algunos casos. El drástico recorte desde los 217 tramos que inicialmente se propusieron a los 25 que recoge la propuesta definitiva da una idea del escaso interés que tiene el redactor del Plan Hidrológico y las comunidades autónomas en proteger los ríos.

Por otro lado denuncia que el nuevo PHE va a suponer ahondar en los problemas de sobreexplotación de los ríos de la cuenca del Ebro, donde la demanda total consuntiva de la CH Ebro se aproxima a los 8.190 hm3/año, siendo la demanda principal la agraria, con 7.681 hm 3/año, lo que representa un 93,8% de la demanda total de la DH Ebro, excluidas las transferencias (Informe de Sostenibilidad Ambiental).

Para garantizar la dotación de riego a las superficies existentes y que, ante la disminución de las aportaciones a corto- medio plazo debido al cambio climático (evaluados descensos de entre el 10 y el 20% del caudal total de aquí a 2100), los agricultores tengan garantías de rentabilidad de sus explotaciones se deben proponer medidas, con programa de compensaciones justas, que retiren del riego en la Cuenca del Ebro las superficies más salinizadas, las de más baja productividad y las que estén peor drenadas y así garantizar las dotaciones en el futuro, o por el contrario, seguir con la política de incremento de las demandas y de las superficies regadas y apostar por un futuro donde habrá escasez para todos (el incremento de superficie producido ha hecho incrementarse la demanda respecto al PHE-96 en torno a 1.000 hm3 según el Esquema de Temas Importantes Anexo B -119). En la actualidad algunos sistemas ya se encuentran en situación de sobreexplotación severa; es el caso de la del Ésera-Noguera de cerca del 80% sobre la aportación media en régimen natural y la del Cinca y Gállego por encima del 58 %.

Por estos motivos se reclama el cumplimiento efectivo del buen estado ecológico de los ríos para 2015 y una actuación urgente del Programa de Implantación de regímenes de caudales ecológicos en tramos prioritarios , asegurándose el cumplimiento de los objetivos en los espacios de la Red Natura que dependen del agua.

Igualmente se demanda que, dada la sobreexplotación de los ríos y la reducción de las aportaciones naturales como consecuencia del cambio climático, se abandone la política de satisfacción e incremento de las demandas y se opte por una gestión sostenible que abandone la construcción de nuevos pantanos, o el recrecimiento de los mismos.

Por último se reclama que adopten medidas inmediatas para minimizar la contaminación difusa procedente de los retornos de los polígonos de riegos y para controlar los puntos de contaminación puntual de origen industrial.