El portavoz de Ben Magec-Ecologistas en Acción de Tenerife, Antonio Rodríguez, consideró «chapucero y sin fundamentación» el informe de impacto ambiental elaborado en febrero de 2003 por el Ministerio de Medio Ambiente sobre el proyecto portuario de Granadilla al emitir una declaración positiva «con condicionantes ridículos».

«Pensamos recurrir por la vía penal el informe, ya que estaba lleno de falsedades y se notaba que el Partido Popular (PP) había cedido en todo ante Coalición Canaria (CC), pero desistimos de hacerlo porque en Tenerife no hay fiscales de medio ambiente, a diferencia de La Palmas», agregó el representante ecologista.

El grupo ecologista ha solicitado a la nueva administración que revoque el anterior informe ambiental sobre el puerto de Granadilla, «porque se ha cometido falsedad en documentos, como por ejemplo las afirmaciones de que el actual Puerto de Santa Cruz no admitía ampliaciones o de que el proyecto era compatible con la conservación de los Lugares de Importancia Comunitaria (sebadales o Montaña Roja)».

En el informe elaborado por los ecologistas canarios y remitido a Medio Ambiente se dice que «se encuentran probablemente frente a uno de los proyectos de obra pública más impactantes proyectados en Canarias en los últimos años, y con mayor número de argumentos para ser rechazado, ya que se pretende hacer una macro-infraestructura justificada en base a un planteamiento falso como es el agotamiento de las actuales instalaciones portuarias de Santa Cruz de Tenerife».

«Nos encontramos ante un proyecto innecesario con un rechazo inmensamente mayoritario de la sociedad canaria y presupuestado en 620 millones de euros, por lo que la retirada del proyecto por parte de los nuevos responsables del Ministerio de Fomento debería ser inmediata», concluye el informe remitido por la organización ecologista.