Ecologistas en Acción presenta como alegación principal al documento del Plan Energético de Aragón su denuncia por el futuro escenario energético aragonés que, según el propio Gobierno de Aragón, va a originar un incremento elevadísimo de las emisiones de gases de efecto invernadero en la comunidad aragonesa.

Si bien este Plan, dentro de las competencias que ejerce el Gobierno de Aragón, apuesta por el desarrollo de las energías renovables, sobre todo de la eólica, visto en conjunto el panorama es preocupante puesto que dentro de un contexto de fuerte incremento generalizado del consumo de energía se dibuja una línea de creciente oferta eléctrica.

La gran capacidad de generación eléctrica aragonesa, ayudada de manera muy importante por la combustión de carbones tanto autóctonos como importados, va a crecer con la instalación de nuevas centrales de combustión, esta vez de gas natural, que aunque mas limpio que el carbón origina igualmente CO2, principal gas causante del efecto invernadero. Aragón sigue, por tanto, siendo una región altamente exportadora de energía eléctrica, con el agravante de que este tipo de centrales ni siquiera genera una socioeconomía local.

Desde Ecologistas en Acción instamos a que se empiece urgentemente tanto a descarbonizar la estructura energética como a limitar la oferta de electricidad, apostando primero por el ahorro energético y posteriormente dando una creciente importancia a la participación tanto en términos absolutos como en relativos de las energías renovables. De poco sirve apostar por las energías renovables si en conjunto la quema de combustibles fósiles no sólo no se reduce sino que se incrementa ostensiblemente.

Otro de los aspectos críticos del modelo energético e igualmente coadyuvante del incumplimiento del compromiso de Kioto, aunque de igual manera el Gobierno aragonés tampoco tiene directamente competencias, es el transporte. Se sigue apostando por un sistema de transporte basado en los desplazamientos por carretera ya sea de personas o mercancías y se tienen poco en cuenta aquellos medios de transporte que menos energía consumen.

El documento presentado por la organización ecologista también pone de manifiesto que la cuestión energética y el cambio climático no figuran dentro de los parámetros a valorar dentro del desarrollo socioeconómico de la región. Se apuesta por proyectos insignes como la Expo o las plataformas logísticas sin considerar en ningún momento la alta demanda energética que, incluso desde las mismas instituciones aragonesas, se asegura va a tener y con las consiguientes repercusiones ambientales.

Valoramos muy positivamente, y así ha quedado explicito dentro del documento presentado, que dentro de las posibilidades competenciales de la comunidad autónoma se destinen importantes, aunque siempre insuficientes, dotaciones económicas para desarrollo de las energías renovables y se muestre una especial sensibilidad hacia esta cuestión, complementándose con propuestas, si bien sin concretar, de apoyo, formación y sensibilización hacia los distintos sectores económicos y la ciudadanía en general. Confiamos pues en que estas declaraciones de intenciones sean pronto una realidad.

En el mismo documento se han incluido propuestas que hemos echado en falta en aspectos concretos, como por ejemplo el desarrollo de la pequeña eólica o una mayor confianza en otras renovables como la solar, ya sea térmica o fotovoltaica. Además y para aquellos aspectos antes citados en los que en Gobierno de Aragón no tiene competencias también se han incluido líneas de trabajo que sí puede desarrollar, por ejemplo, entre otras, una ordenación del desplazamiento hacia los centros de trabajo utilizando transporte colectivo, tanto dentro de las ciudades como a los polígonos industriales periféricos.