Recientemente el Pleno de la Comisión de Ordenación del Territorio y Urbanismo de La Rioja, acordó aprobar inicialmente el Plan Especial del Alto Oja, municipios de Ezcaray, Ojacastro, Valgañon y Zorraquin; diseñando un modelo de desarrollo urbanístico descomunal al servicio de la especulación en una zona que se encuentra protegida en su mayor parte dentro de la Red Natura 2000.

Este Plan abre paso a de actuación desconectadas del territorio actual, con importantes afecciones ambientales y sociales en la zona. A modo de resumen, se señalan a continuación algunos de los “caminos que abre hacia la especulación incontrolada” que pueden detectarse en el Plan presentado:

- Plantea duplicar el terreno Urbanizable en Valgañon y Ojacastro.

- Contempla como Urbanizable toda la carretera de Ezcaray a Zorraquin.

- Plantea un nuevo grupo urbano frente a San Asensio (entre el río y la carretera).

- Amplia como zonas urbanizables aldeas la mayor parte de las aldeas, de las 13 solo siete se mantienen escasamente pobladas, y en lugar de realizar un planteamiento de recuperación y asentamiento de la población proponen nuevas construcciones en ellas, creando dos núcleos urbanos no integrados.

El Boom inmobiliario que nos proponen, demuestra en este caso que, lejos de ser un Plan del Alto Oja, que responda a las necesidades del territorio este proyecto no es más que una excusa para reconvertir amplias zonas rústicas en suelos urbanos y permitir importantes negocios inmobiliarios.

Por otra parte, la mal llamada producción inmobiliaria sigue siendo la principal vía de financiación de unos ayuntamientos cada vez más cargados de responsabilidades hacia sus ciudadanos, y con pocos recursos para hacerles frente. Esta situación no favorece que sea desde el ámbito de lo local desde donde se vaya a controlar este proceso. Se pone en manos de promotores y constructores la posibilidad de poner en carga cualquier lugar con posibilidad de ser soporte de productos urbanísticos vendibles. Promotores y constructores que en las zonas más rentables constituyen un franco oligopolio.

En definitiva un desarrollo insostenible para segundas residencias que no fija población en la zona rural y que va acompañado de importantes infraestructuras además de la ocupación del territorio como pistas, necesidades de llevar agua, luz, medidas de depuración…., además de un incremento importante del consumo de un bien tan imprescindible y escaso como es el agua.

La teoría urbanística más razonable propone centrar la actividad urbanística en la mejora y rehabilitación de las zonas ya urbanizadas para poder proteger y conservar las frágiles estructuras territoriales vírgenes en una Rioja saturada.

Ecologistas en Acción de La Rioja pide la Retirada de este Plan y el desarrollo de otro que planifique y gestiones adecuadamente el suelo, compatibilizando el desarrollo de los municipios con la conservación del paisaje y garantice una adecuada integración de los diversos usos del territorio, utilizando de manera eficiente sus recursos, frente a este urbanismo desbocado e insostenible que nos proponen, que no cuenta con la aprobación de buena parte de los vecinos de la zona.