Desde Ecologistas en Acción de Jerez hemos dirigido un escrito urgente a la Delegación de Medio Ambiente para hacer llegar la denuncia que nos ha transmitido un ciudadano. En la calle Santísimo Cristo de la Defensión, en los soportales que se encuentran justo delante del supermercado Mercadona, se están destruyendo los nidos de golondrinas y aviones que éstos fabrican entre las vigas y el techo para la reproducción, nidos que, una vez destrozados, son reconstruidos por las aves y vueltos a destruir.

El ciudadano denunciante nos informa que en años anteriores también se han producido estas actuaciones y este año se están repitiendo aunque no se ha podido averiguar quién está llevando a cabo, de forma tan salvaje, la destrucción de los nidos.

Miembros de Ecologistas en Acción de Jerez nos hemos personado en el lugar y hemos podido ver y fotografiar como muchos de los nidos están destruidos.

Hay que recordar que tanto las golondrinas (Hirundo rustica) como los aviones (Delichon urbicum) están protegidos en España, e incluidas en el Catálogo de Especies Amenazadas. La organización SEO/BirdLife ha elegido como ave del año 2014 a la golondrina por el declive que esta especie está sufriendo en toda Europa (siendo las posibles causas de este declive los problemas climáticos, el envenenamiento por pesticidas agrícolas, la falta de barro, la competencia con otras aves). El avión común también ha sufrido un importe descenso de su población desde los años setenta del pasado siglo. Dado que son los insectos (moscas y mosquitos) la alimentación básica de estas dos especies, sus poblaciones en la ciudades suponen un gran beneficio para las personas. También el Código Penal español, en el artículo 334 establece que “El que cace o pesque especies amenazadas, realice actividades que impidan o dificulten su reproducción o migración, o destruya o altere gravemente su hábitat, contraviniendo las leyes o disposiciones de carácter general protectoras de las especies de fauna silvestre, o comercie o trafique con ellas o con sus restos, será castigado con la pena de prisión de cuatro meses a dos años o multa de ocho a veinticuatro meses y, en cualquier caso, la de inhabilitación especial para profesión u oficio e inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de cazar o pescar por tiempo de dos a cuatro años.”

Es por ello, que hemos solicitado a la Delegación de Medio Ambiente, la intervención urgente de los Agentes Medioambientales, para el esclarecimiento de estos hechos y la presentación de denuncia ante los organismos competentes (administrativos o judiciales) de los causantes de tan brutal actuación.