Según el Boletín informativo sobre la Calidad del Aire publicado por el Ayuntamiento de Valladolid en su página web, durante el Día sin Coches de ayer, jueves 22 de septiembre, la ciudad alcanzó con diferencia sus mayores niveles de contaminación atmosférica por dióxido de nitrógeno en lo que llevamos de año, rebasándose en las estaciones de control de la contaminación de Arco de Ladrillo y La Rubia el valor límite horario establecido por la Unión Europea para la protección de la salud humana (200 microgramos por metro cúbico, µg/m3), vigente a partir de 2010.

En concreto, en Arco de Ladrillo se alcanzaron 214 µg/m3 de dióxido de nitrógeno a las 8 de la tarde, y en La Rubia 232 µg/m3 una hora antes. Ambas estaciones están orientadas a la medición de la contaminación producida por el tráfico.

Respecto a las partículas en suspensión, las 6 estaciones que miden este contaminante rebasaron el valor límite diario para la protección de la salud humana (50 µg/m3), vigente desde este año, situando al día entre los 10 peores del año por este contaminante. En las estaciones de Arco de Ladrillo y Avenida de Santa Teresa, ambas orientadas al tráfico, se llegó a rebasar el umbral de alerta establecido para este contaminante en algunos países como Italia (donde se fija en 75 µg/m3), al alcanzar concentraciones de 82 y 83 µg/m3, respectivamente. Los niveles de ozono también fueron elevados en los barrios periféricos de la ciudad, donde se rebasó el valor objetivo para la protección de la salud humana (120 microgramos por metro cúbico, µg/m3), también vigente a partir de 2010.

Finalmente, respecto al ruido producido por el tráfico, los datos publicados por el Ayuntamiento de Valladolid indican su mantenimiento en los elevados niveles habituales en las calles de medición (Arco de Ladrillo, Paseo de Zorrilla y Avenida de Santa Teresa).

Al margen de que la situación meteorológica de ayer (tiempo estable con temperaturas altas) fuera favorable a elevados niveles de contaminación atmosférica, para Ecologistas en Acción estos datos demuestran el rotundo fracaso del Día sin Coches tal y como viene siendo planteado por el Ayuntamiento de Valladolid en los últimos años. La nula convicción de las autoridades municipales para trasladar a los ciudadanos el interés de prescindir del coche siquiera un día al año (el Alcalde de la ciudad llego a calificar la iniciativa como «un brindis al sol») y la ausencia de medidas obligatorias de limitación del tráfico en el centro de la ciudad han provocado que, paradójicamente, el Día sin Coches haya sido uno de los más insalubres del año, como confirma el Índice de Calidad del Aire publicado en el propio Boletín municipal.

Ante esta lamentable conclusión, los ecologistas piden al Ayuntamiento que, en interés de la salud de todos los vallisoletanos, ponga en marcha medidas permanentes de reducción del uso del automóvil privado en toda la ciudad, en el marco del preceptivo Plan Anticontaminación, en cuya elaboración y puesta en marcha el Equipo de Gobierno municipal lleva ya casi 2 años de retraso.

Más información: Boletín informativo sobre la Calidad del Aire