El Día Mundial del Medio Ambiente fue establecido por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1972 coincidiendo con la primera cumbre mundial sobre medio ambiente: la Conferencia de Estocolmo sobre el Medio Ambiente. Los fines de este evento anual son el aumentar la conciencia medioambiental, y fomentar la acción global en la protección del medio ambiente.

Ecologistas en Acción de Campo Arañuelo concede los Premios Atila con el objetivo de distinguir y denunciar a aquellas personas, entidades o proyectos que más hayan destacado por su contribución a la destrucción del medio ambiente. Los premios, que se concedieron por primera vez en 1992, tienen dos categorías denominadas “Atila” y “Caballo de Atila”,

Muchas personas se han dirigido a esta asociación proponiendo, desgraciadamente, numerosos candidatos, entre los cuales el Jurado ha elegido.

El Premio Atila 2015 de Campo Arañuelo:

En la modalidad de utilización de fondos públicos para la destrucción del medio ambiente, ha sido concedido al Servicio de Regadíos de la Dirección General de Desarrollo Rural del Gobierno de Extremadura.

Por autorizar la construcción de una concentración parcelaria atroz en Bohonal de Ibor, afectando muy negativamente a una zona de alto valor ecológico de la ZEPA Embalse de Valdecañas.

Unas obras sin justificación con grandes movimientos de tierra, que ha desgarrado cerros de berrocales adehesados bien conservados, con importantes yacimientos arqueológicos de primer orden del Neolítico y del Cobre Superior, y la insuperable afección a la ZEPA del Embalse de Valdecañas, que suponen un alto coste medioambiental y un importe superior al millón y medio de euros para aparcelar dos mil metros cuadrados en tiempos de crisis

Premio Caballo de Atila 2015 de Campo Arañuelo:

Ha recaído en la Central Nuclear de Almaraz por las negligencias ocurridas con el servicio de prevención de incendios de la planta. Este servicio es de vital importancia para la seguridad, como nos recuerda el incendio sucedido en Vandellós I.

El jurado ha decidido conceder un premio especial denominado “El Legado de Atila” al señor Rafael Mateos Yuste, alcalde en funciones de Navalmoral de la Mata, por su apuesta decidida por el cemento y el ladrillo, reflejado en las recientes obras de la rotonda de la Cruz del Rollo y la construcción de un enorme edificio con la excusa de albergar un supuesto museo del tabaco, por la destrucción del escaso patrimonio urbano singular y sentimental que simbolizaba el edificio de la Gota y por su incansable apoyo a las corridas de toros fomentando el maltrato animal desde las arcas municipales.

Nominación Como Agua De Mayo:

El premio denominado “Como Agua de Mayo” destinado a personas o entidades que hayan destacado por su contribución positiva en defensa del medio ambiente y el patrimonio, ha recaído en Luis Martín Pérez, agricultor ecológico y vecino de Navalmoral.

El jurado ha valorado que la agricultura ecológica es un valor en alza por parte de los consumidores, porque es una actividad respetuosa con el medio ambiente y con la salud de las personas, y porque favorece el mantenimiento de formas de vida dignas y sostenibles.

Luis Martín lleva un año produciendo productos con certificado ecológico e intentando abrirse un hueco en el mercado madrileño, a la vez que sirve sus productos al grupo local de consumo “La Charcana” y a diferentes clientes por encargo.

El Jurado expresó su esperanza en que la concesión de estos premios llame a la reflexión a los premiados sobre el deterioro ambiental que sufre nuestro planeta.

El fallo del jurado es inapelable.