Ecologistas en Acción, tras conocer los datos de consumo de agua del Canal de Isabel II, denuncia que en Madrid, a pesar de la sequía, se ha producido un aumento del consumo de agua en casi un 4 % con respecto a 2004. Este incremento en el consumo se debe a la nefasta gestión del agua que está realizando el Gobierno regional.

La lamentable gestión del agua realizada por el Gobierno regional ha “conseguido” que el consumo de agua en Madrid haya pasado de los 598 hm³ de 2004 a 620 hm³ de 2005. Esta circunstancia no se corresponde con la evolución de la población, ya que lo que se ha producido es un incremento en el consumo de agua por habitante.

De esta manera, el Gobierno de Esperanza Aguirre ha logrado invertir la tendencia de descenso del consumo que consiguió su antecesor, Alberto Ruiz Gallardón. En las legislaturas anteriores, con una buena campaña de concienciación ciudadana, Gallardón consiguió reducir el consumo de agua en Madrid, durante el último año de su mandato, en un 2%, con respecto al año anterior.

Ecologistas en Acción considera muy grave el hecho de que desde el Gobierno regional se esté afirmando que este verano se ha producido un ahorro de agua de un 11 %. Sin embargo, este dato no se corresponde, en absoluto, con la realidad, pues el consumo de este verano ha sido casi idéntico al del año pasado. Durante los meses de junio, julio y agosto, según datos del Canal de Isabel II, se han consumido 182,9 hm³, frente a los 182 consumidos en el mismo periodo del año anterior.

Por otra parte, la desidia del Gobierno regional, le ha llevado a no realizar algunas pequeñas infraestructuras necesarias para el aprovechamiento de otros recursos hídricos. Un ejemplo son las duplicaciones de las plantas de tratamiento de agua potable (ETAP) de Valmayor y Majadahonda, que les permitirían aprovechar más recursos procedentes del Alberche, concretamente un volumen del orden de 100 hm  anuales más, y que sin embargo no se han realizado.

Ecologistas en Acción, considera que la actual gestión del agua en la región es la más nefasta que se ha realizado desde que en 1983 se creó la Comunidad de Madrid. A juicio de esta organización esta situación se debe a varios motivos:

- Mala gestión por falta de capacidad y de interés de los principales responsables políticos del Canal de Isabel II y del Gobierno regional.

- Apuesta del Gobierno regional por una gestión economicista del Canal de Isabel II, considerando que el principal objetivo debe ser el incremento de los ingresos. De esta manera el incremento del consumo de agua en Madrid es primordial. Asimismo, esta política conlleva una menor inversión en elementos que pueden ser necesarios, como son las duplicaciones de las ETAPs antes mencionadas.

- Apoyo decidido al crecimiento urbanístico masivo, no permitiendo que haya ningún elemento que pueda ponerle trabas o limitaciones al mismo. Una gestión del agua racional debería limitar más los crecimientos urbanísticos para adecuarlos a las reservas de agua existentes en la Región.

- Forzar la situación para conseguir una situación crítica en Madrid y justificar la aprobación de nuevos embalses para el abastecimiento. Hay que recordar que los embalses que reclama el Gobierno regional se situarían en Ávila y Guadalajara y fueron rechazados por los sucesivos Gobierno del PSOE y el PP, por su falta de utilidad y gran impacto ambiental. Estos embalses sólo favorecerían a las empresas constructoras que llevasen a cabo las obras.

Tener un motivo más para atacar al Gobierno central, aunque ello sea a costa de poner en riesgo el abastecimiento de agua de los madrileños.

Ecologistas en Acción considera que, de cara a la garantía del abastecimiento de agua potable a Madrid, más preocupante que la falta de lluvias, es la gestión que el gobierno de Esperanza Aguirre está llevando, a pesar de la situación de sequía. Por ello, de cara a garantizar el abastecimiento de los madrileños, Ecologistas en Acción, reitera su petición al Ministerio de Medio Ambiente, para que se haga cargo de la gestión del agua en Madrid, al menos hasta que pase la situación de sequía.