La Plataforma por un Río Vivo reivindica a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir actuaciones sostenidas en el tiempo acordes con los objetivos que se marcaron en las obras de encauzamiento del Guadalquivir a su paso por nuestra ciudad: restauración ambiental, protección frente a futuras crecidas e incremento de la relación ciudad-río.

A raíz del incendio en el Puente del Arenal, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir intervino en el río mediante un procedimiento de emergencia. La Plataforma por un Río Vivo solicitó transparencia en el procedimiento de adjudicación y ejecución; y que tras las obras de emergencia se estableciera un protocolo coordinado con otras administraciones para establecer un plan de gestión de la vegetación sostenido en el tiempo evitando actuaciones drásticos.

En estos dos años la Confederación no ha realizado ninguna nueva intervención, a la vez que ha aparecido en prensa denuncias de un sobrecoste de 900.000 euros de aquellas obras de emergencia, aumentando de esta forma la desconfianza de la población en esta institución. El resultado es que a tras un desembolso de 1.800.000 euros la vegetación presenta una densidad similar a la que existía antes de las obras de emergencia.

Por estos motivos la Plataforma por un Río Vivo solicita a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir un plan de mantenimiento de este espacio centrado en las siguientes acciones: limpieza periódica de residuos sólidos del cauce, gestión de la densidad de la vegetación autóctona y eliminación de las especies exóticas, especialmente eucaliptos; y, sólo cuando no existe otra alternativa, retirada de sedimentos en las orillas. Al mismo tiempo nos oponemos al dragado del río, puesto que es una intervención cara y poco duradera en el tiempo, suponiendo una grave alteración del ecosistema acuático.

PLATAFORMA POR UN RÍO VIVO