La Plataforma “Apemsa no se vende”, en la que participa Ecologistas en Acción, reitera las denuncias de ilegalidad de los contratos entre Apemsa y Aqualia.

La Plataforma “Apemsa no se vende” considera insólito que una empresa de mayoría municipal salga en defensa de una empresa privada, con la que tiene numerosos contratos y concesiones ilegales. La Plataforma exige que Apemsa haga pública sus cuentas, incluido las cantidades recaudadas de los cánones local y autonómico, y el destino de ambos.

La nota del director-gerente de Apemsa –a su vez directivo de Aqualia-, difundida por el gabinete de prensa de Apemsa que pagamos todos, reconoce que las obras del tanque de tormentas la estamos pagando con el canon autonómico y el canon local. Hay que tener en cuenta que dichos cánones se vienen cobrando desde 2011 el autonómico y desde 2013 el local. En el BOJA que publica la aprobación del canon local –al que se hace alusión en la nota de Apemsa- se deja claro que: “De acuerdo con lo dispuesto en el artículo 94 de la Ley 9/2010 los ingresos obtenidos durante la vigencia del canon han de ser suficientes para cubrir las inversiones a realizar…”. Además, la Junta cedió la totalidad del importe del canon autonómico, que desde 2011 ha supuesto unos ingresos extra para Apemsa de 4.476.459 €. La pregunta que debe responder el director de Apemsa-Aqualia, Manuel Ferraz Sumillera, y los anteriores presidentes de Apemsa –los exalcaldes Enrique Moresco y Alfonso Candón- es que si existían garantías para financiar las obras necesarias para mejorar la gestión de Apemsa, ¿por qué recurrieron a un préstamo ilegal de Aqualia? ¿Cuánto nos ha costado ese “préstamo”? También deben aclarar por qué recurrieron a ese “préstamo” de Aqualia para ejecutar las obras del tanque de tormentas, que se iniciaron en noviembre de 2012 y finalizaron en noviembre de 2014, cuando desde 2011 venían cobrando el canon autonómico en el recibo del agua para precisamente financiar ese tanque de tormentas.

En esas cuentas claras que reclamamos también se debe explicar el dinero cobrado por Aqualia con cargo a su aportación “tecnológica”, las características de esta aportación “tecnológica”, y las causas de que 2014, año de la incorporación de Aqualia-FCC al accionariado de Apemsa y de asumir su gestión, haya sido el primer año con números rojos; la que era una empresa solvente, la gestión de Aqualia la ha convertido en deficitaria, precisamente el escenario que en el contrato de privatización justifica la subida del recibo del agua. El actual director-gerente de Apemsa, en su calidad también de directivo de Aqualia, también debe explicar cómo consiguió el contrato del tanque de tormentas sin concurso público, por el que se ha embolsado Aqualia 3.856.019,9 €. Y no estaría de más que explicara por qué ha mantenido a Juan Campos -exdirector-gerente de Apemsa y el mayor avalista de Aqualia como adjudicatario ilegal de obras de Apemsa-, como “asesor”, con un sueldo de 128.000 € al año, sin que se sepa las funciones que desarrolla.

La Plataforma espera que el alcalde y presidente de Apemsa no permita que se sigan utilizando recursos públicos en defender a una empresa privada que está deteriorando financiera y ambientalmente a la otrora empresa municipal solvente.