El Área de Desarrollo Urbano Sostenible del Ayuntamiento de Madrid quiere aprobar definitivamente un proyecto residencial sobre la parcela que ocupa el Taller de Precisión y Centro Electrónico de Artillería, un edificio del siglo XIX, en Chamberí, que alberga una arboleda también centenaria. Asociaciones vecinales, de defensa del patrimonio y ecologistas, entre ellas Ecologistas en Acción, se oponen a esta nueva operación especulativa que reduce las escasas dotaciones del distrito y destruye patrimonio histórico y forestal

El Taller de Precisión y Centro Electrónico de Artillería (TPyCEA o TPA) es un edificio fundado en 1898 que, hasta hace un año, era propiedad del Ministerio de Defensa y albergaba personal militar. Se sitúa en la calle Raimundo Fernández Villaverde 46-50, en el barrio de Ríos Rosas, distrito de Chamberí. Urbanísticamente constituye el ámbito APR 07.09.

El Plan General de Ordenación Urbana de Madrid (PGOUM), aprobado en 1997, ya contempla este ámbito y le asigna una gran edificabilidad (superficie a construir). La parcela que conforma el APR 07.09 y que alberga el TPA tiene una superficie de 14.569 metros cuadrados y una superficie construida actual de 16.560 metros cuadrados. El PGOUM permite un aumento notable de esa superficie construida, alcanzando los 54.225 metros cuadrados con destino residencial. Es decir, la sustitución de la dotación militar por viviendas.

A pesar del tiempo transcurrido, la operación urbanística no había llegado a realizarse. Se encontraba con un obstáculo importante. El enorme incremento de edificabilidad obligaba a hacer importantes cesiones de suelo al Ayuntamiento de Madrid con destino a zonas verdes y equipamientos públicos. En concreto le correspondía una cesión de 16.267 metros cuadrados (30% de la edificabilidad), algo que no era rentable, dado que el ámbito tiene una superficie de 14.569 metros cuadrados.

Así llegó una de las numerosas modificaciones de la Ley del Suelo, promovida por el Partido Popular, durante el gobierno de Ignacio González. En diciembre de 2013, la Ley de Medidas Fiscales y Administrativas permitió sustituir las cesiones obligatorias de suelo para zonas verdes y equipamientos por dinero, lo que se conoce como monetizar.

Con esa modificación de la Ley del Suelo aprobada, el Ministerio de Defensa inició los trámites para vender la parcela, y en diciembre de 2014 la adjudicó a Domo Gestora. La misma entidad adjudicataria de las parcelas subastadas por Metro en la calle Cavanilles, de la parcela subastada por la Tesorería de la Seguridad Social en la calle Bretón de los Herreros, o los terrenos que albergaron la antigua Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Madrid, en la calle Guatemala.

Una vez adquiridos los terrenos, el nuevo propietario privado presentó el plan parcial, necesario para desarrollar la operación. Éste fue aprobado inicialmente por el gobierno municipal de Ana Botella, el 29 de abril de 2015, un mes antes de las elecciones.

Este plan parcial plantea la construcción de 355 viviendas, para lo cual hay que demoler el edificio del siglo XIX y su arboleda centenaria, y monetizar las cesiones de zonas verdes y equipamientos. Ahora el Área de Desarrollo Urbano Sostenible pretende aprobarlo definitivamente en el pleno del próximo miércoles 25 de noviembre.

Pero asociaciones vecinales de Chamberí se oponen (Colectivo Ciudadano de Urbanismo Corazón Verde, Salvemos el TPA), apoyadas por otras organizaciones como la asociación Madrid Ciudadanía y Patrimonio, Ecologistas en Acción o la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid, integrados todos ellos en la Plataforma por el Derecho a la Ciudad.

Entre los motivos de oposición está que la nueva operación incrementa el número de viviendas sin aportar nuevas dotaciones, en una zona con un importante déficit de zonas verdes y equipamientos, lo que agravará la situación. Chamberí es el distrito de Madrid que cuenta con la proporción más baja de zonas verdes por habitante, 1,19 metros cuadrados por habitante frente a la media de Madrid de 22,83 metros cuadrados. La dotación de espacios deportivos también es muy inferior al valor medio de la ciudad, 2,29 metros cuadrados por habitante frente a 6,24 metros cuadrados de media.

Adicionalmente, no se puede dejar de reseñar el singular valor histórico y patrimonial del conjunto y de alguno de los edificios que lo componen. Las instalaciones militares del TPA constituyen un conjunto industrial cuya función era fabricar y mantener la óptica de precisión necesaria para regular el tiro de la artillería. En origen se concibieron como varios pabellones de estilo neomudéjar aislados en medio de un frondoso jardín. El valor histórico y arquitectónico de las construcciones como del jardín centenario que cuenta con arboles de gran valor, resulta indudable por lo que debería considerase su inclusión en el Catálogo Municipal de Elementos Protegidos

Por ello, los colectivos ciudadanos piden al Área de Desarrollo Urbano Sostenible que, antes de llevar al pleno la propuesta para su aprobación definitiva, se estudien alternativas que no condenen al distrito a la masificación, a la pérdida de patrimonio cultural y natural y al empeoramiento de su calidad de vida.