Ecologistas en Acción ante el proyecto “Desalación y Obras Complementarias para el Campo de Dalías (Almería), y su Estudio de Impacto Ambiental” se ha opuesto debido a que no se resuelven los problemas de gestión del agua en Almería.

Nos reiteramos en la necesidad de hacer una evaluación conjunta de todos los proyectos que afectan a Almería para realizar una planificación coherente y evitar que se produzcan excesos de capacidad de desalación como esta ocurriendo en el litoral de Almería.

El recurso a la desalación, con elevados costes económicos y ambientales, debería de servir para solucionar situaciones en las que no es posible otra solución y para paliar déficit existentes, no para satisfacer nuevas demandas. Sin embargo no esta sucediendo así, las desaladoras construidas y/o planificadas han generado un exceso de capacidad con el que no se sabe que hacer y que esta nueva desaladora va a incrementar. Antes seria conveniente informar del coste del agua desalada a los posibles usuarios y buscar alguna forma de compromiso, de éstos, de que lo tienen que asumir. La experiencia de las desaladoras de Carboneras y Almería demuestra que cuando se establecen los costes reales el interés por el agua desaparece y estas costosas infraestructuras se quedan sin funcionar, o no lo hacen a toda su capacidad lo que incrementa el precio del agua desalada.

Los recursos de agua con los que se cuenta actualmente para paliar el déficit es el siguiente:

· Desaladora de Carboneras.- 40 Hm3 se construyo para paliar el déficit existente en la zona de Níjar. Cuando se conocieron los costes, la demanda disminuyó y ahora se está ampliando la zona de influencia (regable) de ésta que además se superpone con la de otras actuaciones, y por lo tanto es necesario construir conducciones que permitan utilizarla en otros lugares, elevando su coste, que suponemos asumirán los usuarios.

· Desaladora de Rambla Morales.- 20 Hm3 anuales. Para hacer la situación más inexplicable, se está construyendo ésta en Níjar, y cuya red de riegos se superpone con la de Carboneras.

· Desaladora de Almería.- 18 Hm3.. Y por si fuese poco, además cercana a la anterior se encuentra ésta terminada hace varias años y funcionando de manera testimonial.

· Desaladoras de aguas salobres zona de Cuevas de Almanzora.- Con una capacidad superior a los 13 Hm3 anuales.

· Trasvase del Negratín.- 50 Hm3 (teóricos).

· Trasvase Tajo Segura.- 15 Hm3

· Aportaciones naturales.- 78 Hm3.

· Recursos naturales disponibles.- Por encima de los 50 Hm3, lo que nos da unas disponibilidades de más de 128 Hm3, más que suficientes para satisfacer las demandas actuales, sobre todo teniendo en cuenta que las zonas agrícolas tradicionales están despareciendo sustituidas por urbanizaciones

· En total más de 270 Hm3, sin contar los recursos que se podrían obtener de la depuración de aguas residuales, la reparación de pérdidas en tuberías, y de la contención de la demanda y del ahorro.

La propuesta de El Palmer, causaría un importante impacto ambiental:

1º.- Los Acantilados se encuentran propuestos como Lugar de Interés Comunitario (LIC), “Sierras de Gádor y Enix” con código ES6110008, y en estos momentos su declaración oficial se hará en breve por parte de la Unión Europea, pues está aprobada y está pendiente su publicación.

2º.- El espacio de Acantilados donde se piensa situar la desaladora está calificada por el Plan de Especial Protección del Medio Físico de la Provincia de Almería como Paraje de Interés Ambiental “PS-3 Parajes Sobresalientes: Acantilados de Almería – Aguadulce”.

3º.- Es Monumento Natural del Arrecife Barrera de Posidonia, Decreto 226/2001, y se vería impactado negativamente por el vertido de salmuera, que se haría con una concentración de 40 gr/litro de sal, superior a los 35 gr/litro del mar en esta costa. Estas praderas son un ecosistema muy sensible que se vería irremediablemente afectadas por las alteraciones de salinidad, y que encontrándose a levante del emisario con vientos predominantes de poniente, los vertidos les afectaría.

4º.- El Plan de Ordenación del Poniente Almeriense cataloga a los acantilados Aguadulce – Almería como “Zona de Interés Paisajístico”.

A esto hay que considerar las afecciones que ya existen en la zona, como los vertidos de aguas residuales sin depurar o los procedentes de la piscifactoría.

El documento que se expone no da información exacta y verídica sobre la flora y fauna. Los estudios respecto a la flora y fauna que existe nos presenta la importante biodiversidad que encierra, siendo un buen número de estas especies protegidas (camaleón y águila perdicera), endemismos (Galium ephedroides y otros) o encontrándose en peligro (la chapa “Iberus gualterianus gualterianus”), o cumpliendo la zona una especial importancia en algunas especies (gaviota de audouin y cabra montés), todos ellos irremisiblemente afectados por la central eléctrica.

Innecesario y muy elevado el consumo energético a la elevación de agua hasta los 800 ms.

La propuesta de Balerma también causaría un importante impacto ambiental:

Esta opción no ha evaluado las posibles consecuencias que podría tener sobre las praderas de Posidonia que existentes entre Punta Entinas y la ubicación de la desaladora, con una masa principal de más de 700 has, en la costa del Paraje Natural de Punta Entinas – Sabinar.

Los impactos ambientales de ambas propuestas no se han considerado en cada uno de los casos en lo que respecta a la incidencia en los ecosistemas costeros, flora y fauna, terrestres y marítimos.

El estudio es más teórico que de campo, pues se trata todo el conjunto del litoral como una sola unidad sin tener en cuenta las particularidades de cada tramo de costa que afecta de forma sensible a los ecosistemas y a su biodiversidad.

Respecto a la zona marítima de toda la costa también se ha obviado información respecto a las poblaciones de cetáceos, residentes o de paso, existentes en la costa. Datos que son oficiales (y que se encuentra en la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía) y que se han recogido fruto de la labor de observaciones y atención a varamientos del “Programa de Recuperación de Fauna Marina de Almería – PROMAR-Almería”, y de las observaciones realizadas por la Sociedad Española de Cetáceos. Apuntando alguna de las especies que son más raras de ver y que tiene un pequeño número de ejemplares como es el Zifio de cuvier (Zifius cavirostris), o el caso de los delfines mulares (Tursiops truncatus) que son visitantes asiduos de las piscifactorías que se encuentran en ambas zonas donde se plantean las desaladoras. Indicando que todas estas especies están protegidas por la legislación autonómica, estatal e internacional.

ESTA ACTUACION ES INNECESARIA y responde a un cálculo incorrecto de las demandas reales y de la actual situación de los recursos.