La Federación Murciana de Ecologistas en Acción, lleva más de cinco años denunciando que en esta Comunidad Autónoma existen numerosos campos de golf en situación de ilegalidad, incumpliendo la Declaración de Impacto Ambiental que les obliga a que la procedencia del agua para riego sea de la depuración de aguas residuales, sin que por el momento desde la administración se haya hecho nada por poner fin a esta situación.

Algunos ejemplos de campos de golf que se encuentran en esta situación son:

• Baños y Mendigo (Mosa Trayectum), que ha venido incumpliendo desde su inicio la Declaración de Impacto Ambiental, encontrándose la depuradora parada, entre otras cosas porque en la urbanización no vive prácticamente nadie, mientras que el campo de golf está en pleno rendimiento, regándose dos veces al día con agua de un pozo cercano, autorizado para uso agrícola y no recreativo.

• El campo de golf de la Urbanización Camposol, en «El Saladillo» (Mazarrón), se riega con agua procedente de las zonas del trasvase Tajo-Segura, a través de un complejo sistema de tuberías que de modo ilegal sustraen caudales destinados a la agricultura, acabando finalmente en una balsa a la que también van los caudales de la depuradora de la urbanización, en la que apenas viven cinco mil personas por lo que los caudales depurados no alcanzarían jamás los necesarios para mantener el mencionado campo de golf. Además como en tantos otros casos, estas instalaciones empezaron a funcionar mucho antes de que se procediera a someter a estudio el impacto ambiental del mismo.

• Las instalaciones de «Alto Real» en Molina de Segura, se riegan con agua de pozos, incluso este verano, se ha estado regando con agua de la red de abastecimiento urbano.

• El nuevo campo de golf de “Torre del Rame” en Los Alcázares, ha puesto en marcha el sistema de riego sin que todavía se haya iniciado la construcción de viviendas en la zona, por lo que es imposible que reciba agua depurada.

Ninguno de los campos de golf de nuestra región se está regando con aguas depuradas, ya que nunca los caudales depurados podrían llegar a cubrir las necesidades de agua que unas instalaciones de este tipo requieren. Pero además, las Declaraciones de Impacto Ambiental aprobadas por la Consejería de Industria y Medio Ambiente, están supeditadas a la obtención de autorización por parte de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), para poder ser regado con las aguas procedentes de la depuradora, algo que resulta incompatible con la normativa vigente en materia de aguas, en la que los usos recreativos, entre los cuales se incluyen los campos de golf, son los que menor prioridad tienen para el otorgamiento de concesiones. Por tanto, sólo cuando el resto de usos estén debidamente atendidos, y en particular, el abastecimiento a población y los usos agrarios e industriales, cabría otorgar concesiones de agua a usos recreativos como los campos de golf, por lo que la posibilidad de una autorización de este tipo, resulta totalmente inviable. Esto implicaría que el uso de esta agua para regar un campo de golf sería ilegal y contraria a la normativa vigente.

Por tanto, desde Ecologistas en Acción se pide a la Administración autonómica que ponga freno a todas las situaciones de ilegalidad que se dan en los campos de golf en una Cuenca Hidrográfica como la del Segura, con problemas de abastecimiento y de caudales para la agricultura, y no conceda el beneplácito a una actividad que no cuenta con la autorización administrativa del órgano que conoce, controla y gestiona los recursos hídricos en esta región.

«Roda Golf», en San Javier, «Peraleja Golf» en Murcia, «El Puntal» en Los Belones, «San Ginés» en Cartagena, «Hacienda de Riquelme» en Murcia, «Villarreal» en Lorca, son algunos de los nuevos proyectos para construcción de Urbanización y Campo de Golf, que les ha sido aprobada durante este año la Declaración de Impacto Ambiental favorable por parte de la Consejería de Industria y Medio Ambiente.

El consumo de agua de un campo de golf, es de 10.000 metros cúbicos por hectárea y año. En la Región de Murcia, existen más de cinco campos de golf en funcionamiento, la mayoría de 18 hoyos que tienen una superficie de entre 50/60 hectáreas. Esto supone que al año los campos de golf de nuestra región se beben entorno a unos tres millones de metros cúbicos. Este volumen de agua equivale al consumo anual de una ciudad de más de 50.000 habitantes.

Pero son muchos más los que se encuentran en construcción, en trámites para ser aprobados o en proyecto. Llama poderosamente la atención que en una región con falta de agua, se apueste por un modelo de desarrollo que tanto la requiere.

Por ello Ecologistas en Acción, considera esencial que se limite el número de campos de golf en Murcia y que se les obligue a cumplir lo dispuesto en las Declaraciones de Impacto Ambiental, para evitar el despilfarro que se está produciendo actualmente.