Ecologistas en Acción considera que el futuro Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama debe incluir la mayor parte de la Sierra de Guadarrama, y que se debe declarar como pre-parque, o perímetro de protección, los actuales límites del PORN (Plan de Ordenación de los Recursos Naturales).

Para Ecologistas en Acción el futuro Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama debe incluir las áreas claves de la Sierra y enlazar sus entornos para otorgar una protección continua que garantice la conservación de los valores ecológicos y culturales que ahora están amenazados. Para ello, este Parque Nacional deberá incluir al menos las siguientes áreas naturales de la vertiente madrileña: las cumbres circos y lagunas de Peñalara, los pinares de Abantos, La Pedriza, el valle de Lozoya, las sierras de Cuerda Larga y la acebeda de Robregordo. Mientras que en la vertiente norte deberá incluir al menos los Montes de Valsaín y Navafría, los pinares de Peguerinos, las laderas de la Mujer Muerta, y la Garganta del río Moros.

Ecologistas en Acción consideraría un grave error el establecimiento de distintas figuras de protección en la superficie de la Sierra de Guadarrama en lugar de la declaración de un único Parque Nacional que englobase la mayoría de la sierra. El establecimiento de diferentes espacios protegidos pondría en riesgo la conservación de la sierra de Guadarrama al impedir una planificación y gestión única en toda la zona protegida de la Sierra de Guadarrama, facilitando los desarrollos urbanísticos, la construcción de infraestructuras de transporte y otras graves amenazas.

La sierra de Guadarrama mantienen diversos tipos de usos tradicionales que son compatibles con el Parque Nacional de Guadarrama, tal y como establece el Plan Director de Parques Nacionales. Este Plan considera compatibles con el parque Nacional los usos y aprovechamientos tradicionales que no supongan un impacto negativo significativo en los procesos ecológicos, y podrán mantenerse supeditados a la conservación de los valores naturales.