Ecologistas en Acción ha remitido alegaciones al Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) aprobado inicialmente por el Ayuntamiento de Guillena por el que se pretende triplicar el suelo urbanizable residencial e industrial con la incorporación de cerca de 20.000 nuevas viviendas y más de 300 hectáreas de suelo industrial.
Especialmente graves son los crecimientos residenciales propuestos para la unión física de Guillena con las Pajanosas mediante promociones privadas de segunda residencia ligadas a campos de Golf y las 1420 viviendas de los Lagos del Serrano que amplia y da cobertura legal a la urbanización ilegal que se ha consentido en esa zona.
En relación a los crecimientos industriales destacan las 245 hectáreas que se generan en la zona de El Esparragal-Las Cruces ligadas a la autovía y a la Mina “Cobre las Cruces” que van a transformar un suelo de especial protección agrícola para desarrollos industriales ajenos a las demandas de Guillena.
Los crecimientos no vienen acompañados de oferta de transporte público colectivo incrementando la dependencia del coche en los desplazamientos hacia Sevilla y el tráfico de camiones.
Guillena juega un importante papel estratégico en la Ordenación Territorial de la provincia de Sevilla como nexo entre los ámbitos de vega y Sierra. Esta situación somete al municipio a una tensión urbanística ligada por un lado al crecimiento especulativo desvinculado de la población local y por otro a la creciente parcelación y urbanización de terrenos forestales para segunda residencia.
El Planeamiento aprobado no sólo no limita los crecimientos asociados a estas tensiones urbanizadoras sino que los potencia, consolidando y generando una cantidad de bolsas de suelo a urbanizar que distorsionan de forma grave la estructura territorial y urbana del Municipio y por ende la ordenación territorial de todo el ámbito de influencia.
Con este P.G.O.U. Guillena apuesta por un crecimiento desacoplado de las necesidades de la población local en el que los pueblos son fagocitados por las urbanizaciones y donde las infraestructuras siempre van a la zaga de lo construido, generando graves déficits de servicios y de integración social.
Frente a ese modelo, que sólo sirve para el enriquecimiento de unos pocos, Guillena todavía tiene la oportunidad de blindarse ante estas presiones urbanísticas de carácter coyuntural pero de consecuencias irreversibles, mediante la elaboración de un P.G.O.U. que persiga reconducir los desequilibrios actuales mediante la reconversión interior, optimizando los espacios y acabar con las aventuras urbanísticas en zonas protegidas por su elevado valor ecológico y paisajístico.
Guillena, como municipio de transición debe garantizar la función de amortiguación que le corresponde para una correcta Ordenación Territorial, profundizando en la protección paisajística, eliminando la proliferación de ilegalidades mediante su no consolidación y garantizando la protección del medio físico como valor de futuro.
No cabe la justificación de este nuevo PGOU como adaptación del Planeamiento de Guillena a la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía (LOUA), ya que este nuevo Planeamiento es claramente expansivo e introduce actuaciones de urbanización desmesurada, que contraviene el espíritu y la norma de la Ley a la que se pretende adaptar.
Ecologistas en Acción concluye en sus alegaciones que el P.G.O.U aprobado es insostenible e introducirá graves tensiones territoriales, sociales y ambientales por lo que debe ser rechazado en su conjunto y devuelto al Ayuntamiento para que introduzcan criterios de racionalidad urbanística y territorial, que se adapte tanto en la forma como en el fondo a la LOUA.