Pesqueros marroquíes con barcos ilegales pescan a seis millas del suroeste de Tarifa (Cádiz) con artes prohibidas (redes de enmalle a la deriva) dentro de la Zona española de Protección Pesquera.

El Arte de pesca volanta a la deriva, a juicio de Ecologistas en Acción del Campo de Gibraltar, es la más dañina de todas las empleadas en la pesca comercial, ya que, después de haberlas visto actuar en el fondo marino, llegamos a la conclusión de que son artes de pesca indeseables.

Podemos afirmar que hemos inspeccionado algunas de estas redes después de estar perdidas en la mar durante años y, debido a los materiales sintéticos empleados para su confección, siguen pescando y matando a todas las especies que se acercan a ellas sin provecho alguno. Es más, lo seguirán haciendo durante muchísimos años más.

Aún estando prohibido este arte de pesca por la UE, los barcos de pesca ilegales marroquíes calan las redes para pescar en pleno Estrecho de Gibraltar, dificultando el tránsito de buques, pudiendo ocasionar un accidente con las mismas. Estas redes permanecen a la deriva, movidas por la corriente y los vientos, bien en superficie o entre aguas, solas o unidas a la embarcación que las caló.

Además se ha de tener en cuenta el impacto que esto está causando en la fauna marina por capturas accidentales como delfines, rayas o tortugas. España, con esta actitud de sumisión, no sólo está infringiendo una normativa Europea, sino está poniendo en peligro todas las poblaciones del Estrecho de Gibraltar. Estos pesqueros ilegales están pescando dentro del corredor de balizamiento del paso de los buques por el Estrecho de Gibraltar. Una red de volanta a la deriva es fácil que se enrede en las hélices de un buque o que un buque choque con un pesquero ilegal marroquí.

Si España sigue con esta actitud de dejadez, denunciaremos estos hechos ante la UE.