Cerca de 1.500 ecologistas de toda la isla organizados por Ben Magec-Ecologistas en Acción y Z Club movieron ayer en Agaete 5.400 metros cuadrados de plástico negro que simbolizaban el asfalto de la autovía prevista hacia La Aldea hasta «hacerlo desaparecer en el horizonte de una montaña», en palabras del portavoz de la Federación, Heriberto Dávila.
«Existen otras opciones no tan devastadoras como la que quieren llevar a cabo», añadió el representante del colectivo, que rechazó el «impacto sobre el parque natural protegido de Tamadaba, el corazón verde de Gran Canaria y uno de los pocos que queda en condiciones en la isla».