Los días 28, 29 y 30 de junio se celebra el X Gran Trail Peñalara, una prueba que congrega a más de un millar de corredores, quinientas personas voluntarias, requiere la instalación de trece controles fijos, diez puntos de avituallamiento y el acceso de vehículos de apoyo. Todo ello, en las zonas más sensibles del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama y su zona periférica. Ecologistas en Acción lleva años denunciando que esta y otras macropruebas deportivas que se autorizan en este espacio protegido, vulneran la legislación nacional y degradan el espacio protegido.

El 25 de junio, se cumplió el sexto aniversario de la declaración del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama. La figura que debía haber blindado la conservación de este valioso espacio natural, se ha convertido en un reclamo para la organización de todo tipo de actividades que masifican, erosionan y degradan las cumbres más altas de la Comunidad de Madrid.

El Plan Director de Parques Nacionales, aprobado por Real Decreto del Consejo de Ministros, el 22 de octubre de 2016, establece (artículo 3.2.5.p) que las pruebas deportivas son incompatibles con los objetivos de los parques nacionales. Sólo excepcionalmente, permite que la administración autorice pruebas de baja intensidad ambiental que transcurran por carreteras o caminos públicos. Sin embargo, Madrid y Segovia permiten decenas de eventos deportivos, con tramos que discurren fuera de sendero. Sólo en 2017 (dato más actualizado facilitado por el Parque Nacional), en Madrid, se celebraron 51 pruebas en el Parque Nacional y 10 en la zona periférica de protección. En Segovia, se realizaron 17 pruebas en el espacio protegido y 5 en la zona periférica. En total sumaron 9.645 participantes, concentrados en cuatro meses (mayo, junio, julio y septiembre). Una situación que vulnera objetivamente el mandato del Plan Director.

Las tres pruebas más multitudinarias que se repiten anualmente son: 100 km Madrid-Segovia por vías pecuarias del Camino de Santiago (1000 participantes), Gran Trail Peñalara (950 participantes) y TrailWalker Madrid 2017 Intermón Oxfam (800 participantes). De estás, por el trazado del recorrido, la más impactante es el Gran Trail Peñalara, organizado por la Real Sociedad Española de Alpinismo Peñalara, por décimo año consecutivo, vulnerando la normativa.

El Gran Trail Peñalara se desglosa en tres pruebas casi simultáneas: Gran Trail Peñalara (GTP), con un recorrido de 116 kilómetros y 500 participantes que se inicia a las 23.30 h del 28 de junio, en Navacerrada. El Trail Peñalara 60K (TP60), con un recorrido de 65 kilómetros y 450 participantes que comienza a las 7:30 h.  del 29 de junio. Estas dos carreras discurren por las cumbres del Parque Nacional y, además, el TP60, atraviesa el macizo de Peñalara, la joya del espacio protegido. La tercera prueba es el Cros Nocturno Navacerrada, se celebra como previa al GTP. Se inicia a las 21:30 h. del 28 de junio, discurre fuera del Parque Nacional y de la zona periférica pero afecta a Red Natura, su recorrido es enteramente nocturno y congrega a 400 participantes.

El GTP y el TP60, tienen tramos que discurren fuera de senderos, como el entorno del pico Maliciosa, atraviesan canchales, como a su paso por el macizo de Peñalara, afectan a nacimientos de arroyos como el Cancho Negro, zonas húmedas y turberas como la pradera del Emburriadero, pisotean praderas con presencia de la planta nutricia de la mariposa Parnassius apollo (especie protegida), piornales (Cytissus oromediterránea) que es el hábitat del insecto Podisma carpetana (saltamontes),en peligro de extinción, se vadean ríos como el río Navacerrada, el pisoteo degrada nacimientos de arroyos en el entorno del puerto del Nevero y Peñalara, etc.

En cuanto a las pruebas en horario nocturno, debido a las luces que portan los participantes, afectan especialmente a anfibios y murciélagos. Los tramos nocturnos están desaconsejados, incluso por los informes que aporta el promotor de la prueba, por el gran impacto sobre la fauna.

El impacto de estas pruebas es muy elevado, al efecto del millar de corredores hay que sumar 500 voluntarios, 13 puestos fijos, 10 puntos de avituallamiento, vehículos de apoyo, etc. Esta prueba no tiene justificación ninguna, Podrían realizarse en otras zonas de la Comunidad de Madrid y en otra época que no coincida con periodo crítico en la reproducción de la fauna y desarrollo vegetativo de la flora. Además, este año, con la ola de calor y falta de precipitaciones de la primavera, el impacto puede ser superior, porque tanto el suelo, como la flora y fauna son más vulnerable, al estar más debilitados.

Ante esta situación, Ecologistas en Acción reclama a la administración gestora del Parque Nacional, tanto en Madrid como en Castilla y León, responsabilidad y abandono del trato de favor hacia determinados colectivos o grupos de interés y aplicación del Plan Director de Parques Nacionales. Detrás de las carreras de montaña, no hay ningún fin altruista, no es más que un enorme negocio. La Real Sociedad Española de Alpinismo Peñalara sólo por inscripciones del GTP y del TP60, ingresará 93.500 euros.