Tras seis meses de la entrada en vigor de la nueva normativa europea sobre residuos, la ciudad de Elche continúa a la cola de la Comunidad Valencia en cuanto a recuperación y reciclaje, con índices entorno al 20 % en esta materia, muy por debajo del 50 % exigido. Y esto pese a la costosa reforma realizada, con el beneplácito del Ayuntamiento de Elche, en la Planta de Els Cremats, reforma que se adjudicó a la empresa concesionaria de la planta, la UTE Urbahormar, vulnerando la normativa europea de contratación.

Esta situación de incumplimiento de la legalidad va a perpetuarse a buen seguro con la adjudicación en los próximos días de la nueva contrata de limpieza de nuestra localidad. La multimillonaria contrata de más de 300 millones de euros, pese nuestras demandas, no ha contado en su elaboración con un plan de gestión previo, obligatorio a partir del próximo año para organizar y optimizar el servicio y adecuarlo a la normativa vigente. Y por si fuera poco, se ha impedido que pequeñas y medianas empresas pudieran beneficiarse de la adjudicación de alguno de los servicios contemplados en la contrata, algo que a buen seguro hubiera ayudado a empresas de nuestra localidad a sobrellevar la grave situación económica actual consecuencia de la crisis de la COVID-19.

Con todo lo dicho, desde Margalló-Ecologistes en Acció pensamos que hay motivos más que sobrados para exigir responsabilidades políticas por lo que consideramos una muy deficiente labor en el área de limpieza y gestión de residuos de nuestra localidad. Por ello, solicitamos el relevo inmediato del responsable directo de esta situación, el Sr. Héctor Díez, concejal del área de limpieza del Ayuntamiento de Elche desde hace ya cinco años. El Sr. Díez es también responsable, entre otras cosas, del lamentable funcionamiento del servicio de limpieza en las pedanías del camp d’Elx, de la proliferación en los últimos años de vertidos incontrolados en todo nuestro término municipal, de la insostenible gestión de los residuos de poda del palmeral y de la mala gestión de los puntos limpios, en su mayoría cerrados temporal (Carrús) o definitivamente (Cementerio Viejo).

Por último, con la certeza de que, desgraciadamente y vistas las decisiones que se están tomando, esta insostenible gestión municipal de residuos va a continuar, y seguros también de las escasas intenciones del regidor de limpieza de renunciar a este cargo o a ningún otro, anunciamos nuestra intención de volver a pedir dentro de seis meses de manera más explícita el relevo efectivo del Sr. Díez, el cual detenta al menos dieciséis competencias municipales más a las que se puede dedicar, esperemos que con más acierto.