Ecologistas en Acción considera que el despliegue de renovables dentro de lo que se está llamando el proceso de transición energética, está siendo desordenado y especulativo. A nivel estatal, en diciembre de 2020 había proyectos, entre concedidos y en tramitación, con el doble de potencia de la que el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima ha marcado como objetivo para 2030. En Aragón la falta de planificación es, si cabe, más preocupante, pues en relación a la energía eólica aglutina casi el 50 % de los nuevos proyectos en España, con cerca de 60 proyectos en tramitación. También en cuanto a proyectos fotovoltaicos, el boom está lejos de ser razonable, pues se están tramitando más de 100 parques fotovoltaicos. En total 12 GW de potencia que tiene permisos de acceso y conexión concedidos, más del doble de la potencia instalada hasta la fecha.

El Parque Santa Cruz III forma parte de un entramado de seis parques que se pretende instalar en los sasos (relieves tabulares) del interfluvio Cinca-Alcanadre. Se trata de los Sasos de Santa Cruz, Farrazuelo o Lagunarrota y el de las Fitas.

Estos proyectos están siendo tramitados por Forestalia, empresa con capital aragonés, pero que tributa en Madrid, donde tiene la sede social y son parte del proyecto Delta 2, que engloba a 26 nuevos parques eólicos en las provincias de Teruel, Zaragoza y Huesca, con una potencia de 860 MW y que fue vendido en febrero de 2020 a Repsol

En sus alegaciones Ecologistas en Acción denuncia las graves afecciones para la biodiversidad que tendría el parque Santa Cruz III pues estos sasos son zonas prioritarias para las aves. Así se verían afectadas especies como el milano real, catalogada como en peligro de extinción, el halcón peregrino, el aguilucho cenizo, el águila real o el cernícalo primilla y especies esteparias: como la ganga ortega, ganga ibérica o el sisón. Existe una importante presencia de buitres leonados que usan distintos dormideros en la zona y siete dormideros invernales de grullas que podrían verse afectados por la instalación de estos aerogeneradores. Mención aparte merece la población de alimoche, con 7 nidificaciones en la zona afectada. Para esta especie amenazada, en otras comunidades autónomas, se han establecido normas para su protección frente a los parques eólicos que descartarían de entrada este proyecto, al prohibir la instalación de aerogeneradores a menos de 10 km de nidos de esta especie. De igual forma, las especies de murciélagos se ven muy afectadas por los aerogeneradores. Más de nueve especies amenazadas se han detectado en el ámbito de los parques eólicos. En el caso del parque eólico Santa Cruz III, el proyecto afectaría a 1 especie en peligro de extinción, 7 especies de aves catalogadas como vulnerables, 2 sensibles a la alteración de su hábitat y no menos de 9 especies de murciélagos, también calificadas como vulnerables.

En el escrito se pone de manifiesto, que los molinos de viento se hallan muy cercanos a la población de Terreu y que parte del vial de acceso al parque, con una anchura de rodadura de 6 m y 15 m en la base, un aerogenerador y la línea de media tensión canalizada se han proyectado sobre suelo no urbanizable de especial protección del ecosistema, urbanísticamente incompatibles con el proyecto, pues se prohíbe cualquier actuación que destruya la vegetación, entre las que se encuentran dos especies de la flora aragonesa amenazada.

La fragmentación de este proyecto, segregándolo de los proyectos San Isidro II y Santa Cruz IV, que se proyectan compartiendo viales de acceso y otras infraestructuras comunes y en la misma alineación, supone una vulneración de la legislación de impacto ambiental, pues no se tiene en cuenta los impactos acumulativos y sinérgicos de todos los proyectos y evita que la tramitación se realice a nivel estatal al sumar entre ellos más de los 50 MW que marca la legislación.

Ecologistas en Acción solicita que se desestime la construcción del parque eólico por los importantes impactos sociales, ambientales y paisajísticos, que supone este proyecto en un ecosistema estepario especialmente escaso y con una muy alta singularidad: geológica, paisajística, botánica y ornitológica. Proyecto, que pretende exportar energía y riqueza fuera de la zona y que no ha pasado por el necesario proceso de ordenación territorial y sujeción al Plan Nacional Integrado de Energía y Clima que necesita la implantación de renovables. Es necesario y extraordinariamente urgente luchar contra el cambio climático, pero no debe ser a costa, ni de la biodiversidad, ni de nuestro más singular patrimonio natural.