• La Coordinadora Estatal Stop Ganadería Industrial, en la que participa Ecologistas en Acción, ha lanzado una carta abierta dirigida al Gobierno español con medidas a nivel nacional para acabar con este modelo de producción industrial.
  • Los firmantes de la carta abierta solicitan una reunión urgente con los ministerios implicados para tratar este asunto.

La Coordinadora Estatal Stop Ganadería Industrial, en la que están representadas más de 60 plataformas vecinales de zonas rurales afectadas por la ganadería industrial de toda España, ha enviado hoy una carta abierta al presidente del Gobierno y a los ministros y ministras de Agricultura, Pesca y Alimentación, Transición Ecológica y Reto Demográfico, Sanidad y Consumo con el objetivo de poner fin al insostenible modelo de ganadería industrial.

A esta carta se han sumado más de 800 organizaciones y colectivos, como por ejemplo la Plataforma por la Ganadería Extensiva y el Pastoralismo, ADDA, Amigos de la Tierra, Compassion in World Farming, Ecologistas en Acción, Food and Water Action Europe, Greenpeace, Justicia Alimentaria, SEO Birdlife, WWF España, Juventud por el Clima-Fridays for Future España, la Fundación Santa María la Real del Patrimonio Histórico o el Colegio Profesional de Geografía en Castilla y León.

También se han adherido al documento más de 500 profesionales del ámbito agrícola, ganadero, de la docencia, de la práctica médica y veterinaria, de la investigación, de la ingeniería o de la abogacía, entre otros muchos.

Este respaldo masivo se ha conseguido en menos de una semana, en pleno debate y polémica que han generado las declaraciones del ministro Alberto Garzón sobre la necesidad de reducir el consumo de carne, sus críticas a la ganadería industrial y macrogranjas y el apoyo a un modelo de ganadería extensiva.

“Es hora de que nos escuchen”, explica Inmaculada Lozano, portavoz de la Coordinadora Estatal Stop, “no podemos dejar que se muera el debate sobre el modelo de ganadería industrial, sobre sus nefastas consecuencias para el planeta y para la España rural sin llegar a un compromiso claro de acción. En muchos pueblos ya no podemos ni beber agua del grifo y en otros la estamos bebiendo contaminada sin saberlo. ¡Basta ya de palabras y polémicas! Queremos compromisos serios para acabar con este grave problema”, concluye.

En los últimos años estamos siendo testigos del avance desmesurado y descontrolado de la ganadería industrial en España, lo que está contribuyendo a serios impactos ambientales, económicos, demográficos y de salud pública en la España rural. Estamos a tiempo de evitar consecuencias aún más dramáticas e irreversibles, pero para ello hacen falta, urgentemente, acciones valientes y contundentes.

Ante el enorme clamor de la sociedad, cada vez más administraciones públicas se posicionan en contra de la ganadería industrial. Por ejemplo, la Junta de Comunidades de Castilla La-Mancha ha puesto en marcha la primera moratoria regional a la ganadería industrial de porcino, las Diputaciones de Ciudad Real, Albacete y Granada han aprobado mociones en contra de este modelo y, en Cataluña, se ha puesto en marcha una moratoria en 68 municipios hasta 2025. Sin embargo, estas medidas, pese a que son un primer paso, son claramente insuficientes. Por ello, los firmantes de la carta abierta piden:

  • una moratoria a la ganadería industrial de al menos cinco años: ni explotaciones nuevas ni ampliaciones de las existentes, paralizando también los expedientes que están iniciados.
  • una evaluación estratégica del sector ganadero teniendo en cuenta el impacto acumulado de los diferentes modelos productivos.
    la reducción gradual de la cabaña ganadera en producción intensiva hasta alcanzar un 50% menos de la actual en 2030.
  • la caracterización técnica y la diferenciación a nivel normativo y comercial de la ganadería extensiva a la industrial, para que haya un etiquetado claro y homogéneo que permita, a las personas consumidoras, identificar la procedencia y modelo de ganadería de todos los productos alimentarios de origen animal que adquieran.
  • una reunión conjunta con los cuatro ministerios a los que se dirige la presente carta para abordar, con urgencia, la problemática social y ecológica expuesta.