La defensa de Doñana ha estado plagada de problemas. Estos veinte años de ecologismo social han sido de intensa actividad en el Parque Nacional.

Juan Romero. Ecologistas en Acción de Huelva. Revista Ecologista nº 95.

Doñana y sus marismas mareales, por sus características de suelos pantanosos y arenosos, no tuvieron aprovechamiento hasta bien entrado el siglo XVIII, cuando algunos terratenientes comenzaron a transformar tierras para cultivo agrícola y a hacer plantaciones masivas de pinos. Más tarde, con el Patrimonio Forestal del Estado, llegaron los cultivos masivos de eucalipto.

Por ello, en Doñana había a finales del siglo pasado más de diez millones de eucaliptos y unos cuarenta y cinco millones pinos. Las tierras en regadio entonces eran 18.200 hectáreas.

Marisma del espacio natural Doñana.

En 1971 el Gobierno español aprobó un decreto para la utilización de las aguas subterráneas para agricultura, con la previsión de poner en riego 25.000 hectáreas. Al mismo tiempo, los brazos del río Guadalquivir, que vertían sus aguas a las marismas, fueron amputados con canalizaciones y muros. De las iniciales 150.000 hectáreas de marismas, hoy quedan 30.000 y de ellas solo 17.000 son inundables. La nefasta política hidrológica ha convertido la marisma fluvial en una marisma continental.

La protección de Doñana

En 1969 se crea el Parque Nacional de Doñana. En 1999 se integra en el Espacio Natural Doñana, un área de 108.086 hectáreas, con el humedal más importante de España, la zona con más diversidad biológica y abundancia de especies de aves del país y área de cría e invernada de aves migratorias de todo el Continente Europeo. Por su importancia, el Parque Nacional es inscrito en 1994 como Patrimonio Universal de la Humanidad por la UNESCO.

Sin embargo, a pesar de toda la protección, cada cierto tiempo surgen proyectos que amenazan Doñana y que, según Ecologistas en Acción, son incompatibles con su protección.

«Los intensos cambios tecnológicos de la agricultura, la urbanización del litoral (…) están originando en Doñana una grave degradación…» . Se denunció en 1992, en el informe de la Comisión Internacional de Expertos compuesta por científicos de diferentes disciplinas, creada por el Gobierno autonómico, Junta de Andalucía, ante las fuertes tensiones sociales por la situación de Doñana.

Dunas fósiles. El Asperillo, Costa Doñana

En 1988 se dio a conocer Costa Doñana, un proyecto de construcción de una urbanización de seis kilómetros con 32.000 plazas hoteleras y campo de golf en la duna fósil de El Asperillo. Más tarde se demostró que fue un caso de especulación urbanística con tráfico de influencias.

La Coordinadora Ecologista de Huelva, que formaba parte de la Confederación Ecologista Pacifista de Andalucía (CEPA) y fue embrión de Ecologistas en Acción, convocó una marcha en Doñana en la que participaron más de cinco mil personas y donde nació la Coordinadora Salvemos Doñana con la que fuimos a Estrasburgo a presentar una queja.

Duna fósil de El Asperillo en Doñana.

Así las cosas, en 1992, la Junta de Andalucía reaccionó a las presiones sociales y creó una Comisión Internacional de Expertos, que desaconsejó tajantemente la urbanización litoral y propuso en su lugar la protección de toda la duna fósil de El Asperillo.

Catástrofe minera anunciada y denunciada en Aznalcóllar

En 1998 ocurrió una catástrofe anunciada y denunciada por Ecologistas en Acción. La Coordinadora Ecologista de Huelva y la Federación Ecologista-Pacifista de Sevilla tuvieron conocimiento de que residuos del Polo Químico de Huelva se estaban trasladando a las instalaciones mineras de Aznalcóllar (Sevilla).

A su vez, un facultativo de la mina nos alertó de irregularidades en la presa, en su construcción y en su funcionamiento que podía provocar una catástrofe en Doñana. Lo pusimos todo en conocimiento del Juzgado de Sanlúcar la Mayor y en la Audiencia Provincial de Sevilla, fue archivado en ambos.

El 25 de abril se produce la rotura de la presa de la balsa de decantación de la mina de Aznalcóllar, propiedad de Boliden, vertiendo 6.000.000 metros cúbicos de lodos tóxicos sobre las riberas de los ríos Agrio y Guadiamar, que afectaron a 4.634 ha en el entorno del parque de Doñana. No hubo responsabilidades políticas ni penales.

Al año siguiente, la mina pidió los permisos para su reapertura. El Patronato de Doñana, en el que ya estábamos representados Ecologistas en Acción, se posicionó en contra, pero su decisión no era vinculante. La Junta de Andalucía lo obvió y subvencionó la apertura de la mina que más tarde cerró.

En 2013, a la vez que estaban iniciándose las diligencias para determinar a quién corresponde pagar los 90 millones por limpiar el vertido, la Junta publica un Decreto-Ley para la reapertura, adjudicándolo en 2015. Todo el procedimiento administrativo aparenta estar repleto de irregularidades graves y Ecologistas en Acción está ejerciendo acciones legales contra la reapertura.

Rotura de la presa de Aznalcóllar el 25 de abril de 1998.

Oleoducto Balboa y petroleros cada día en las playas de Doñana

En 2008 se supo que el oleoducto proyectado con la refinería Balboa en Los Santos de Maimona (Badajoz) iba a recorrer unos 200 kilómetros pasando por el entorno Doñana y nueve espacios naturales protegidos, desembocando en el puerto de Huelva.

El 16 de abril de 2008 las organizaciones ecologistas informamos al Pleno del Consejo de Participación de Doñana sobre el proyecto de la refinería, el oleoducto que atravesaría la comarca y los riesgos de posibles vertidos de crudo por la afluencia masiva de buques petroleros cerca de las playas de Doñana.

Por primera vez, un presidente del Consejo, Ginés Morata, tuvo la valentía de actuar por Doñana, oponiéndose al oleoducto con su voto. También nos apoyaron la Estación Biológica y algunos alcaldes.

El oleoducto fue totalmente desestimado debido a la oposición generalizada. El verano del año siguiente hubo dos vertidos en las playas de Doñana, lo cual demostraba que eran una amenaza real.

Cultivos forestales de eucalipto en un espacio protegido

En 2008 el Grupo ENCE proyecta sembrar 5.000 nuevas hectáreas de eucaliptos en la finca Cerrado Garrido ubicada en las marismas, a escasos 100 metros del Parque Nacional.

Desde nuestra organización, apoyada por la Estación Biológica, denunciamos y solicitamos el cese de las siembras y pedimos el blindaje del espacio natural y su zona de influencia contra estos cultivos con plantas exóticas. Con esta presión, ya plantadas 160 ha, la Junta de Andalucía se vio obligada a paralizar los trabajos y cancelar este inapropiado proyecto.

El dragado del Río Guadalquivir en lugar de la recuperación del estuario

En octubre de 2009, en un Consejo de Participación Extraordinario, el Puerto de Sevilla presentó un proyecto de dragado de profundización del Río Guadalquivir consistente en aumentar el calado del río en dos metros de profundidad de media en el canal de navegación.

En Ecologistas en Acción manifestamos en los Consejos de Participación y ante la Misión de la UNESCO de 2011 nuestra oposición al dragado.

El proyecto tenía una polémica DIA de 2003 y el nuevo Ministerio de Medio Ambiente nombró una Comisión Científica dependiente del CSIC, para asesorarse. Esa comisión presentó un diagnóstico del río que recomendaba recuperar íntegramente su estuario porque estaba funcionando como un canal con alto índice de salinidad y turbidez.

Con ello se vieron avaladas todas las solicitudes de ejecución de medidas de Ecologistas en Acción, siendo así determinantes para paralizar el dragado de profundización, que actualmente se encuentra oficialmente cancelado.

Deterioro y pérdida del agua, sobreexplotación y detracción

Ya en la década de los 70 se habían dado alarmas del deterioro cuantitativo del acuífero Almonte-Marismas. Sin embargo, se siguió experimentando un incremento de la superficie de regadíos y del número de balsas y pozos. El POTAD de 2003 reconocía la sobreexplotación del acuífero.

En 2006 Ecologistas en Acción puso en conocimiento del Fiscal Jefe de la Audiencia Provincial de Huelva y de la Delegación de Medio Ambiente, que un empresario agrícola en Bonares, en la finca El Avispero, había destruido la cubierta vegetal, nivelado el terreno y construido balsas de riego. Se produjo la primera sentencia condenatoria, que ha marcado un antes y un después de la impunidad de los abusos agrícolas.

En 2009 llegaron varias denuncias a la Comisión Europea. Entre ellas la nuestra por la situación de sobreexplotación del acuífero y el deterioro de los ecosistemas de Doñana. La Comisión emitió un Dictamen motivado de infracción, puesto que consideró que las autoridades españolas se habían abstenido de aplicar y ejecutar medidas de control e inspección para lograr disuadir a quienes realizan extracciones no autorizadas, de prohibir definitivamente la expansión de regadíos en la zona sensible y de establecer un límite de superficie regable y de extracción de agua del acuífero.

Hoy día hay una situación de total impunidad y dejación de funciones por existir más de un millar de pozos ilegales que siguen detrayendo agua.

Recientemente la finca Hato Ratón ha recibido la concesión de 5,2 hectómetros cúbicos de agua del río Guadiamar, importante aporte de las marismas. Esta finca lleva extraídos ilegalmente unos 60 hectómetros cúbicos en las últimas décadas y ha acumulado millones de euros en multas por pozos ilegales. Ecologistas en Acción ha recurrido esta concesión ante la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir.

Gansos en la marisma seca de Doñana.

Almacenar gas natural bajo el acuífero de Doñana

En 2008, para solicitar la DIA y la AAU del yacimiento Marismas como almacén de gas tras su explotación extractora, fue dividido en cuatro subproyectos que se presentaron de forma independiente: Saladillo, Marisma Oriental, Marisma Occidental y Aznalcázar.

La situación administrativa de cada uno es diferente, pero es Marismas Occidental el único viable legalmente, si bien las concesiones de la DIA y la AAU no se han hecho según normativa vigente. Ecologistas en Acción votó en contra del subproyecto citado en el Consejo de Participación en 2013. UNESCO y UICN recomendaron en sus misiones a Doñana de 2011 y 2015 que se realizara una correcta evaluación de la amenaza de esta instalación industrial.

En marzo de 2016 el Gobierno otorgó, mediante Resolución, reconocimiento de utilidad pública a Marismas Occidental y todos los permisos administrativos que aún no tenía. Ecologistas en Acción interpuso recurso de alzada en contra por la incertidumbre científica sobre su peligrosidad para las personas y el medio ambiente.

Además, participamos activamente en la resurgida plataforma Salvemos Doñana. Organizamos una manifestación ciudadana en 2016 y hemos entregado este año más de 200.000 firmas contra el proyecto.

IGME y CSIC, han realizado informes recientes valorando los riesgos de sismicidad, contaminación e inundaciones. El Gobierno debe de revisar la DIA y la Junta debe de revisar la AAU. En tanto se resuelve el recurso de 2016, Ecologistas en Acción ha solicitado la revisión de oficio de la AAU.

Grupo de personas voluntarias en la extinción del incendio de Doñana del verano pasado.

La vulnerabilidad de Doñana ante un incendio forestal

En verano de 2017, un incendio forestal en Doñana quemó más de 8.500 ha de monte de pinar y eucaliptal.

Las instalaciones sin inspección ni control, sin las medidas que exige el Plan Infoca y con un riesgo alto como es una carbonería, fueron denunciadas por Ecologistas en Acción en el Consejo de Participación. Hay, por tanto, responsables por acción y otros por omisión, cuya dejadez ha permitido que este incendio llegase a la gravedad que alcanzó.

Ecologistas en Acción plantea un nuevo modelo de restauración forestal con la campaña de concienciación Doñana Revive, que ha incluido labores de restauración simbólica con vegetación mediterránea diversificada y recuperación de las sabinas y enebros litorales.