“Un año más, la desembocadura del riu Sec, Benicarló (Castellón), su vegetación y sus puntos de agua, han sido eliminados por maquinaria pesada gracias a las nefastas políticas litorales de los organismos públicos. ¿Acaso no sabían que es un espacio natural protegido por la Ley 11/1994, de 27 de diciembre, de espacios naturales protegidos de la Comunidad Valenciana y por el Plan de Acción Territorial e Infraestructura Verde del litoral (PATIVEL)?”

El Ayto de Benicarló ha permitido y potencia que la desembocadura del riu Sec y sus láminas de agua, sean alteradas para preparar las playas de cara a la época estival. Lo que no está tan claro son las razones que obliguen a destruir este paraje natural protegido e importante corredor verde, reconocido por el propio PATIVEL.

2016

2018

Para los que áun no sepan que las leyes existen y deben ser respetadas, la balsa de aguas salobres de la desembocadura del riu Sec es un humedal protegido de acuerdo con la Ley 11/1994 de Espacios Naturales Protegidos de la Comunidad Valenciana, que en su última modificación, de 5 de octubre de 2016, dice:

“Capítulo III

Protección de otras áreas

Artículo 15. Zonas húmedas.

  1. Son zonas húmedas, a los efectos de la presente ley, las marismas, marjales, turberas o aguas rasas, ya sean permanentes o temporales, de aguas estancadas o corrientes, dulces, salobres o salinas, naturales o artificiales, así como cualquier otro espacio de características análogas, con independencia de la denominación que reciba.
  2. Las zonas húmedas deberán ser preservadas de actividades susceptibles de provocar su recesión y degradación, a cuyo fin los terrenos incluidos en las mismas serán clasificados, en todo caso, como suelo no urbanizable sujeto a especial protección, de conformidad con lo dispuesto en la Ley 4/1992, de 5 de junio, sobre suelo no urbanizable”.

Si a esto le unimos que la zona forma parte de un cauce público, que es una zona de dominio público marítimo terrestre y que hasta el famoso y controvertido Plan de Acción Territorial de Infraestructura Verde Litoral de la Comunitat Valenciana-PATIVEL, considera la zona como un importante corredor ecológico, pues más grave se nos antoja la alteración de este espacio con o sin las perceptivas autorizaciones administrativas. Pues no hay razón lógica que obligue a actuar de esta forma tan severa sobre un espacio natural litoral y en contra de las planificaciones verdes reinantes.

Para los que aún no sepan que hasta el más mínimo espacio natural es fuente de vida, les diremos que la lámina de agua dulce de la desembocadura es una importante zona para el desarrollo de ciclos vitales de numerosas especies de insectos, anfibios, aves y mamíferos. Son abrevaderos naturales para aves y mamíferos durante el verano; son zonas de alimento para especies insectívoras como el chorlitejo chico, golondrinas, vencejos, aviones, etc.; son zonas de descanso para especies migratorias y aves marinas (en la zona era habitual la gaviota de audouín)…

Les diremos que el agua salobre permitirá que se cree vegetación típica (saladares litorales) y fomentaremos la cría de chorlitejos y otras especies protegidas que hoy en día están en grave recesión de sus poblaciones por alteración de sus hábitats.

Les diremos que las desembocaduras de los ríos y ramblas mediterráneas están a merced de los procesos naturales de avenidas y escorrentías tras las lluvias y de los temporales marinos. De tal manera que invertir dinero público en laminar y nivelar cordones de gravas o tapar láminas de agua, es un auténtico despilfarro económico innecesario y sin sentido. Mejor se hubiera utilizado el dinero público en retirar residuos y basuras que alteran el espacio natural o retirar la carretera que cruza la desembocadura o zona inundable, para construir un puente, sin ojos, que tenga varias funciones básicas: evitar los impactos sobre la desembocadura; eliminar zonas de riesgo por inundación para los ciudadanos; permitir la regeneración natural de la desembocadura; potenciar la educación ambiental sobre este espacio natural tan importante; crear un acceso peatonal sin riesgo inundable, etc.

Un año más, Ecologistas en Acción muestra su oposición a estas nocivas actuaciones litorales que no benefician ni al litoral, ni a la biodiversidad ni a la humanidad. Además, informamos que se han denunciado estas actuaciones ante las administraciones públicas pertinentes y solicitamos la dimisión o cese inmediato de los responsables públicos que hayan autorizado este tipo de agresiones al litoral.

¡Queremos desembocaduras vivas!