• En la Semana Europea de la Movilidad, Ecologistas en Acción lamenta la aprobación de un desarrollo urbanístico que amenaza con colapsar las vías de acceso a Madrid y desbordar la capacidad de su red de transporte público.
  • Según un informe de Ecologistas en Acción y el Instituto para la Democracia y el Municipalismo, se estima en medio millón el incremento de viajes asociados directamente a la Operación Chamartín (rebautizada como Madrid Nuevo Norte).
  • El efecto del desarrollo Madrid Nuevo Norte afectará a toda la región, empeorando los problemas de contaminación, aumentando las emisiones de gases de efecto invernadero y agravando el desequilibrio en la movilidad actual entre sur/este y norte/oeste.

La aprobación de la operación urbanística Madrid Nuevo Norte por parte de la Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid, prevista para mañana jueves, supone el pistoletazo de salida a un proyecto que podría causar importantes impactos negativos sobre la movilidad en la capital.

Según el informe Evaluación de los efectos de la propuesta Madrid Nuevo Norte (APR 08.03 Prolongación de la Castellana) en las infraestructuras de transporte del área metropolitana de Madrid , elaborado por Ecologistas en Acción y el Instituto para la Democracia y el Municipalismo, se calcula en aproximadamente medio millón el número diario de nuevos desplazamientos generados por la operación. Esto supondría un aumento del 23 % de entradas a la capital y la consiguiente saturación de las correspondientes infraestructuras viarias, así como de la red de transporte público, cuya capacidad podría verse sobrepasada.

Ubicada en una zona estratégica del norte de Madrid en términos de movilidad a nivel local, regional y estatal, Madrid Nuevo Norte afecta a una superficie de casi 300 hectáreas, equivalente a tres veces el parque de El Retiro. En total, la operación prevé una edificabilidad de 2.662.500 m², con predominio del uso terciario al sur de la M-30 y de uso residencial al norte de esta.

El hecho de que la mayor parte de la edificabilidad de la operación se destine a uso de oficinas y comercial provocará un aumento exponencial del número de viajes motorizados en la zona norte de Madrid, no solo desde el propio municipio sino también a nivel regional. Hay que recordar que el uso de oficinas genera más del doble de viajes, y el comercial más de siete veces, respectivamente, que el uso residencial. Por ello, el mencionado informe calcula, siguiendo las tendencias demográficas de Madrid y de los municipios de su alrededor, que 539.000 vehículos adicionales podrían entrar y salir cada día de la capital a causa del desarrollo de Madrid Nuevo Norte. Esta cifra podría ser superior, dependiendo del porcentaje de la edificabilidad que finalmente se destinase a uso comercial.

Este incremento de los desplazamientos motorizados anularían y contrarrestarían todos los esfuerzos del Plan A por reducir los niveles de contaminación que actualmente sufre la ciudad y por cumplir con los compromisos climáticos del Pacto de los/as Alcaldes/as firmado por Madrid en 2015. Asimismo, y al apuntalar la Operación Chamartín un modelo urbanístico dependiente en gran medida del automóvil, supondría en el futuro otro obstáculo más para implementar políticas de movilidad sostenible que reduzcan las emisiones de sustancias contaminantes y de gases de efecto invernadero.

Por otro lado, en relación a la red de transporte público, utilizando datos del Consorcio Regional de Transportes de Madrid, actualmente la capacidad máxima de entrada en Madrid en hora punta se estima en algo menos de 200.000 personas. Según los cálculos realizados por el informe, en los escenarios de mayor afluencia de viajes asociados al desarrollo de Madrid Nuevo Norte, aproximadamente 163.000 personas estarían entrando en Madrid en hora punta. A efectos prácticos estos datos suponen que la red de transportes público se vería sobrepasada, y las previsiones expresadas de que el transporte público absorbería la demanda nueva de movilidad solo puede considerarse excesivamente optimistas.

Todo lo anterior pone de manifiesto el fuerte impacto de la Operación Chamartín sobre la movilidad del conjunto de la ciudad y de la región. Sin embargo, ni la promotora Distrito Castellana Norte (DCN) ni el Ayuntamiento de Madrid han aportado hasta el momento ningún dato ni análisis sobre la capacidad de carga del territorio y las implicaciones en movilidad de esta operación. Para la organización ecologista, es una triste ironía que un plan así se apruebe justo cuando se celebra la Semana Europea de la Movilidad.

Por todo ello, Ecologistas en Acción muestra su preocupación ante los graves daños en las condiciones de vida, la salud y la sostenibilidad medioambiental que la Operación Chamartín va a causar en la ciudad de Madrid. Y alerta de las nuevas necesidades de inversión en infraestructuras públicas de transporte que de forma indirecta se van a generar, con el consiguiente incremento de la carga financiera para el conjunto de la sociedad madrileña.