Ante la elección por parte del Ministerio de Transición Ecológica de la ubicación para la depuradora que sustituirá a la de Vuelta Ostrera, en la isla Montii o isla de Solvay, Ecologistas en Acción se felicita por la elección y por la oportunidad que representa, como sostuvo en las alegaciones entregadas al Estudio de Impacto Ambiental de las posibles ubicaciones en febrero de 2018.

La organización ecologista cree como así se ha confirmado que la ubicación elegida es la única posible, por su menor afección de todas las propuestas, porque es la más alejada de núcleos vecinales y la que menor impacto ambiental tendrá, al ser un vertedero de residuos químico, suponiendo una oportunidad única para conseguir su limpieza y regeneración. Está a menos de un kilómetro de la actual con lo que se pueden aprovechar las infraestructuras existentes, estando muy próxima a la red ferroviaria y a la A8 y A67.

Siendo una magnífica oportunidad, la total regeneración paisajística de toda la zona donde se construirá la nueva EDAR, como se contempla en los informes de Impacto Ambiental.

Ecologistas en Acción ve claramente que está decisión tiene que ser el punto de partida para iniciar la recuperación ambiental del espacio de la ría, como venimos pidiendo desde hace años ante la preocupante situación de deterioro, como se constata en numerosos informes oficiales.

La implantación en la futura EDAR de un sistema de fitodepuración como tratamiento terciario para el efluente de salida, como solicitábamos en las alegaciones, permitirá el aporte del caudal de salida de la EDAR al medio receptor con un efecto inocuo,   no siendo necesario construir  un  emisario submarino, caro y ambientalmente insostenible. La tecnología existe y está disponible, el ministerio debe decidir su implantación, permitiendo que los procesos de depuración de aguas residuales sean totalmente sostenibles, dentro de los criterios de la economía circular declarados en las normativas de la UE.

La urgente reducción de los vertidos industriales que contaminan el cauce de la ría, con la revisión de las Autorizaciones Ambientales y la necesaria protección de las especies, son medidas que las administraciones han de tomar de forma inmediata, asumiendo sus responsabilidades ante un problema ya histórico.