Ecologistas en Acción denuncia entre otras irregularidades la reclasificación en la última fase de terrenos protegidos propiedad del grupo inmobiliario San Román, relacionado con la operación Malaya. También alerta la asociación ecologista de la ausencia de hasta cuatro informes preceptivos y vinculantes, pese a lo cual el Ayuntamiento de Las Rozas aprobó provisionalmente el Plan. Exige a la Comunidad de Madrid que no apruebe definitivamente el Plan y que obligue a abrir un nuevo período de información pública.

Ecologistas en Acción, junto con otras organizaciones ecologistas, políticas y vecinales, ha dirigido un escrito a las direcciones generales de Urbanismo y Evaluación Ambiental de la Comunidad de Madrid dando cuenta de importantes irregularidades en el Plan General de Ordenación Urbanab de Las Rozas, aprobado provisionalmente por el Pleno Municipal el pasado mes de junio. Ecologistas considera que la documentación presentada contiene irregularidades graves y que además se han introducido cambios sustanciales respecto a la aprobación inicial que obligarían a abrir un nuevo periodo de información pública. En consecuencia, pide a la Comunidad de Madrid que no apruebe definitivamente el Plan y obligue al Ayuntamiento a subsanar los errores y abrir un nuevo periodo de información pública.

En el escrito se informa a la Comunidad de Madrid de la reclasificación de terrenos de Suelo No Urbanizable de Especial Protección propiedad del grupo inmobiliario San Román (relacionado con la operación Malaya), que han pasado a ser Suelo Urbanizable No Sectorizado en la aprobación provisional del Plan, a partir únicamente de un informe ambiental de encargo y escaso rigor presentado como alegación en el último periodo de información pública. Dicho informe omite la mayor parte de los valores y especies presentes en los terrenos, que conforman un encinar en proceso de recuperación natural. Hay que destacar que en todas las versiones anteriores del Plan estos suelos permanecían como suelo protegido, a lo largo de los 6 años que dura ya la tramitación del PGOU. Un cambio de clasificación del suelo se considera cambio sustantivo del Plan General, y por lo tanto, según la legislación vigente, obliga a someter el Plan a un nuevo periodo de información pública, algo que el Ayuntamiento se resiste a hacer. Por otro lado, la evaluación ambiental de estos cambios introducidos tendría que ser efectuada por la Dirección General de Evaluación Ambiental de la Comunidad de Madrid.

Ecologistas en Acción denuncia además la ausencia de cuatro informes obligatorios y vinculantes en la documentación aprobada por el Pleno. Se trata de los que deberían emitir la Dirección General de Evaluación Ambiental, la Dirección General de Carreteras, la Confederación Hidrográfica del Tajo y el Canal de Isabel II. La propia Comunidad de Madrid requirió explícitamente al Ayuntamiento en el mes de marzo que no sometiera el PGOU a votación en el Pleno sin haber recibido y contrastado estos cuatro informes. El propio concejal de Urbanismo reconoció en los Plenos de los meses de junio y julio que tales informes no se habían recibido, incumpliendo el requerimiento de la Comunidad de Madrid.

En tercer lugar, el escrito denuncia la ausencia de documentos obligatorios en la documentación sometida a información pública tras la aprobación inicial, como el Estudio de Incidencia Ambiental y el resumen ejecutivo expresivo. También se da cuenta del incumplimiento de determinaciones vinculantes incluidas en tres informes ambientales emitidos en distintas fases del Plan, entre 2005 y 2009, que pese a no haber sido subsanados el Ayuntamiento pretende ignorarlos.

Igualmente se denuncia la modificación “a la carta” de las áreas homogéneas en la aprobación provisional de junio. La primera propuesta, presente en todas las fases del Plan desde 2005 y validada por la Comunidad de Madrid, dividía el núcleo principal de Las Rozas en tres áreas homogéneas separadas por la autovía A-6 y la carretera de El Escorial. La propuesta actual engloba en una única área homogénea todo el núcleo, con el objetivo de poder así incrementar la edificabilidad en el casco histórico, al computar en la misma área homogénea que zonas menos densas y con más equipamientos.

Por último se denuncia la exclusión de las Casas y Salones Parroquiales del Catálogo de Bienes Protegidos del Plan, en contra del informe vinculante del Área de Arquitectura y Patrimonio de la Dirección General de Vivienda de la Comunidad de Madrid. El PGOU permitiría el derribo de estos edificios y la construcción de bloques de viviendas de hasta tres plantas en este conjunto patrimonial, que junto a la Iglesia de San Miguel Arcángel y sus jardines, forma el conjunto arquitectónico más importante y emblemático del casco de Las Rozas.