PDF - 1.3 MB
Informe La calidad del aire en Sevilla y su área metropolitana en 2010

Ecologistas en Acción acaba de hacer público su informe sobre la calidad del aire en Sevilla y en el área metropolitana durante 2010. La principal conclusión es que tenemos un problema crónico con el Ozono.

Los contaminantes más problemáticos en Sevilla es ozono troposférico (O3) y las partículas en suspensión (PM10, partículas menores de 10 micras) ya que en los últimos años se vienen superando los valores límite de protección a la salud humana, fijados por la legislación europea y por la Organización Mundial para la Salud (OMS), para dichos contaminantes.

Los datos correspondientes al año 2010 publicados por la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía (que son los que se utilizan en este informe que presenta Ecologistas en Acción), indican que, un año más, la calidad del aire de Sevilla y su área metropolitana sigue sin cumplir los valores límites marcados por la legislación europea.

Después de analizar los datos recogidos en este informe para contaminantes de partículas en suspensión PM10 y Ozono O3, que a juicios de los expertos son los más peligrosos e importantes para los efectos de la salud y el medio ambiente y los más problemáticos para un ambiente urbano, hemos llegado a las siguientes conclusiones:

  • Para contaminación por Ozono, el problema se agrava con una situación problemática, siendo una de las zonas urbanas más contaminadas de España. Es sin duda el contaminante que presenta más problema en Sevilla y tenemos la necesidad de tomar decisiones contundentes, ya que estos límites se superan en casi todas las estaciones.
  • Para los límites de PM10, los valores de protección para la salud humana, registran actualmente niveles por encima del límite en algunas de las estaciones de Sevilla. En cambio, si tenemos en cuenta los valores de protección para la salud humana que recomienda la OMS, en la mayoría de las estaciones registran niveles por encima del límite.

Además, Sevilla cuenta con una red de vigilancia insuficiente para controlar adecuadamente la calidad del aire en la ciudad, ya que no se mide las partículas en suspensión de tamaño menor de 2,5 micras (PM2,5), siendo una de las sustancias más perniciosas para la salud.

La principal fuente de contaminación atmosférica en Sevilla y en su área metropolitana es el tráfico. La contribución de esta fuente a la contaminación del aire ha aumentado en los últimos años con el aumento del tráfico rodado. Lo más grave es que con las nuevas infraestructuras previstas, en el futuro continuará aumentando. Para que la calidad del aire en nuestra ciudad no empeore, alcanzando niveles críticos, es necesario el replanteamiento de las políticas municipales de tráfico e infraestructuras.

La política de información a la población por parte de las Administraciones Públicas es correcta, aunque se echa de menos una mayor respuesta por parte de los medios de comunicación. Además, es necesario la realización de campañas de información y concienciación entre la población.

Los Ayuntamientos y la propia consejería no cuenta con planes para prever situaciones de alerta ni para enfrentarse a ellas, planes que están obligado tenerlo por la normativa actual sobre la calidad del aire.

Para Ecologistas en Acción, dado que la principal fuente de contaminación atmosférica en Sevilla y en su área metropolitana es el tráfico rodado, cualquier intento serio de reducir los niveles de contaminación pasa por disminuir el uso del automóvil en la ciudad.

Ozono Troposférico, el valor límite diario de contaminación para la protección de la salud humana está fijado en 120 microgramos/metro cúbico (µg/m3) de concentración media diaria que sobre pasa las ocho horas seguidas. Pues bien, 7 de las 9 estaciones que miden este contaminante rebasaron este límite diario. Además estas misma estaciones de medidas, también superó el límite del umbral de información al público establecido en 180 μg/m3, valores límite marcados por la legislación actual.

Partículas en suspensión en 6 de las 7 estaciones que miden PM10 superaron el valor límite anual recomendado por la OMS que sitúa en 20 μg/m3 de media anual, así como el valor medio anual de la red, que alcanzó los 29 μg/m3. Poniendo de manifiesto cual es el origen del problema, que es el tráfico y no las famosas intrusiones de polvo sahariano.