La denuncia de diversos colectivos de la ciudad como Guelaya-Ecologistas en Acción y Melilla ConBici sobre los problemas de seguridad de peatones y ciclistas en Melilla después de lo ocurrido al melillense Carlos Huelin fue calificado como «oportunismo» por el consejero de medio ambiente. En este comunicado recordamos las denuncias que año tras año hemos hecho sobre la alta siniestralidad y la insostenibilidad del tráfico en Melilla.

Para Guelaya-Ecologistas en Acción y MelillaConBici la violencia vial en Melilla es la responsable de que sea la ciudad más insegura de toda España en siniestralidad peatonal.

¿Es solo un accidente? La violencia vial se intenta ocultar en forma de accidentes.

¿Pero son accidentes o es violencia vial? En Melilla existe una permisividad insultante por parte de las autoridades a la hora de multar, no entendienden que es parte de la educación.

Melilla destaca en solitario en este índice de siniestralidad. La tasa poblacional de peatones atropellados con heridas graves o fallecidos entre 15 y 65 años fue en Melilla la máxima de España.

Para mejorar estas cifras, lejos de contemplar programas de pacificación del tráfico en la ciudad se volvía a buscar chivos expiatorios, la culpa era de los peatones.

¿Reflexiones y peticiones oportunistas en el marco del triste homicidio de Carlos Huelin? No, peticiones y reflexiones de Guelaya-Ecologistas en Acción y Melilla ConBici año tras año; lo denunciamos en Mayo de 2014 tras la publicación de un informe de Mapfre sobre siniestralidad peatonal en España entre 2005 y 2009, donde estaba claro que Melilla tenía el índice de siniestralidad peatonal más alto de toda España, una tasa poblacional de 20,4 niños heridos graves o fallecidos en ese período frente al 4,1 de media en España

Y no oportunistas, porque no hay oportunismo alguno en cumplir con las responsabilidades que nos competen y que forma parte de nuestro objeto social, criticar las políticas públicas, en este caso de movilidad por insostenibles.

Demandar, exigir, reivindicar, informar, en el caso de las instituciones y asociaciones que velamos por una ciudad más amable, y más humana para los ciudadanos y ciudadanas, es uno de nuestros objetivos, y por triste que sea el caso, porque lo provoca la pérdida de una vida humana, el camino pasa por la concienciación social. Y así lo venimos haciendo, y tenemos que hacerlo en este momento.

Educar, formar y sancionar también para hacer cumplir la ley. Y más allá de tímidas campañas educativas en los centros ¿qué se ha hecho para paliar o evitar, para sancionar? ¿Dónde están los controles de velocidad? ¿Y los de alcoholemia en las zonas que se saben calientes? ¿Dónde los obstáculos para reducir la velocidad salvo unos cuantos pasos resaltados? Porque sí, Sr. Quevedo, en efecto, no hay solución mágica, más que el cumplimiento de la norma y una buena gestión encaminada a la pacificación del tráfico, hoy totalmente inexistente. Y a usted, entre otras instancias le compete velar porque así sea. Y a nosotros, demandárselo, ahora y siempre.

Queremos un Pacto social, y hemos demandado formar parte de la Mesa por la movilidad. ¿También se lo tenemos que recordar? Es usted quién no quiere convocarla, y por eso, se convierte en parte el problema.