Quiero alimentos sin veneno ¡gracias!

España es el país europeo con mayor consumo de pesticidas, con un consumo que supera las 40.000 toneladas anuales y la aplicación media de 3 kg/ha, alcanzando en el caso del viñedo los 12 kg/ha entre herbicidas, insecticidas y fungicidas.

La OMS estima que cerca de un quinto de los 12 millones de casos de cáncer que se diagnostican cada año en el mundo se pueden atribuir a exposiciones ambientales y ocupacionales. Estos y otros datos de la OMS vienen a confirmar un hecho largamente sospechado, muchas de las enfermedades no infectocontagiosas se derivan de la exposición química ambiental en su concepto más amplio: alimentación, hábitos de vida y medio ambiente.

[Díptico] Vivir sin pesticidas

Un reciente estudio de Ecologistas en Acción desvela que los alimentos españoles tienen residuos de 33 pesticidas disruptores endocrinos, tóxicos relacionados con daños para la salud como problemas reproductivos, cáncer de mama, próstata y tiroides, enfermedades neurológicas y enfermedades metabólicas, como obesidad y diabetes. La normativa actual, que permite una cantidad supuestamente segura de pesticida en los alimentos, no protege frente a los pesticidas disruptores endocrinos para los que cualquier pequeña exposición supone un riesgo, especialmente en etapas de mayor vulnerabilidad como el desarrollo uterino y la primera infancia, donde pueden producir efectos irreversibles.

Un mundo sin glifosato es posible

El glifosato es el principio activo que contienen la gran mayoría de los herbicidas químicos usados en nuestro país. Estos herbicidas se aplican de forma sistemática en muchos cultivos, pero también en espacios públicos tales como parques y jardines, bordes de carreteras o aceras.

En 2015 la OMS clasificó glifosato como “probablemente cancerígeno” en base a los estudios de 17 expertos que señalan la relación de esta sustancia con 4 tipos de cáncer: hepático, riñón, páncreas y linfoma. Además, el glifosato está vinculado con otros efectos, tanto por su uso directo por parte de agricultores/as y operarios/as como por la exposición indirecta de la población: reproductivos (mayor frecuencia de abortos y defectos de nacimiento), neurológicos (mayor frecuencia de Parkinson), hormonales (alteraciones endocrinas), entre otros.

Ante esta preocupante situación, un grupo de organizaciones de distintos países europeos, nos hemos organizado para solicitar a la UE la prohibición de glifosato. Para que la propuesta sea tenida en cuenta necesitamos un millón de firmas ¡ayúdanos a conseguirlas firmando!

También puedes presentar una moción en tu ayuntamiento para que se comprometa a no utilizar glifosato en los espacios públicos de su gestión. Si te animas ¡pídenos información!

Necesitamos suelos sanos para producir alimentos sanos

En Europa muchos suelos fértiles van desapareciendo por procesos de degradación, sellado y contaminación, de manera que cada vez son menos las tierras que se pueden cultivar.

El suelo es un recurso natural no renovable de vital importancia por sus múltiples funciones ambientales, económicas y sociales, entre las cuales cabe destacar la producción de alimentos. Sólo los suelos sanos son capaces de producir alimentos sanos.

El uso intensivo y continuado de pesticidas sobre el suelo provoca su degradación y su contaminación. Los suelos rociados con herbicidas quedan desprotegidos de cubierta vegetal siendo fácilmente erosionados y perdiendo su fertilidad.
Según la FAO, el 33 % de los suelos del planeta están de moderada a altamente degradados debido a la erosión, el agotamiento de nutrientes, la acidificación, la salinización, la compactación y el sellado, o la contaminación química.

A pesar de su vulnerabilidad y su vital importancia para nuestra alimentación, actualmente no existe una directiva marco que regule la protección de los suelos. Ecologistas en Acción apoya la Iniciativa Ciudadana Europea People4Soils para solicitar una ley de protección de los suelos. Necesitamos 40.500 firmas en España ¡ayúdanos a conseguirlas!

Hay alternativas y son sencillas

El uso de pesticidas en agricultura ha sido creciente desde la Revolución Verde, contaminando aguas, suelos y alimentos, y derivando en importantes problemas ecológicos y sanitarios. Muchos de los plaguicidas utilizados son retirados tras comprobarse su elevada toxicidad después de años de utilización.

La agroecología plantea formas viables y eficaces de manejo agrario basados a la vez en modernos conocimientos científicos y tecnológicos y en conocimientos agronómicos tradicionales campesinos. En las producciones agroganaderas, el manejo ecológico de plagas es clave para frenar el uso masivo de pesticidas y, con ello, los graves impactos para la salud y el medio ambiente que están provocando. Dichas formas no se aplican de manera generalizada por intereses económicos de la agroindustria, cuyos lobbies presionan a las instituciones para perpetuar una agricultura intensiva muy dependiente de insumos externos de síntesis química y con alto coste energético para su obtención (plaguicidas, fertilizantes, semillas).

Cada vez se extienden y demandan más, alternativas de producción ecológicamente sostenibles y socialmente justas de manejo de los recursos naturales de manera que la superficie dedicada al cultivo ecológico no ha dejado de crecer en nuestro país en los últimos años.

¡Comiendo ecológico contribuyes a construir un mundo más justo y sostenible!