Recientemente, técnicos de campo del proyecto LIFE-Lince ibérico han localizado el cadáver de dos linces en una de sus mejores poblaciones, la situada en las sierras de Andujar-Cardeña. Los animales habían sido marcados con un collar emisor para su radioseguimiento.

Tras consultar a los técnicos responsables de la conservación de la especie, se nos ha indicado que los dos animales pudieron morir como consecuencia de una pelea con otros linces, situación que parece bastante habitual en poblaciones reducidas y con escasos recursos alimenticios, pocos conejos, tal y como ocurre en las actuales poblaciones linceras de Andalucía. Para contrastar estos datos y evitar interpretaciones erróneas y cruces de información, que por desgracia siguen ocurriendo con especie tan mediática como el lince, Ecologistas en Acción ha solicitado informe oficial de la necropsia realizada a los dos ejemplares y, además, que este desgraciado hallazgo sea explicado en el seno del Proyecto LIFE donde participa esta organización.

Debemos recordar que el uso de collares emisores para la localización remota de fauna silvestre es una técnica de estudio de fauna que, si se aplica de manera adecuada, no resulta lesiva para el ejemplar en estudio y se muestra muy útil para conocer el estado de conservación y las causas de mortalidad de la poblaciones silvestres de fauna amenazada, entre ellas las de lince ibérico. En este sentido reclamamos su utilización en los casos necesarios para así conocer mejor lo que le está pasando a nuestra fauna amenazada y actuar para evitar su desaparición.

Ecologistas en Acción quiere recordar que actualmente nos encontramos en un periodo crítico para la conservación del lince ibérico. En estos momentos se está produciendo la dispersión de individuos jóvenes que buscan nuevos territorios. En un campo castigado por la escasez de conejos, el exceso de infraestructuras viarias altamente impactantes, las urbanizaciones en el medio natural y el uso de sistemas ilegales de exterminio de depredadores -lazos, cepos, venenos- es previsible que sigan apareciendo linces muertos en próximas fechas. En este sentido queremos seguir reclamando una serie de medidas que se muestran necesarias para garantizar la conservación de la especie y que ya han sido reclamadas por los principales expertos en la conservación del lince ibérico:

- Reforzar las poblaciones de conejo en los núcleos madre de Andujar y Cardeña. Tratando de favorecer la presencia de presas potenciales para el lince y, a medio plazo, conseguir una población continua de lince ibérico entre Cardeña y Andujar.

- Acelerar mejoras de hábitats y disponibilidad de alimento para la especie en las áreas más inmediatas, favoreciendo el crecimiento centrifugo de las poblaciones de Doñana y Andujar-Cardeña.

- Impulsar la ejecución de un Plan de Movilidad sostenible en el entorno de Doñana. Debe de ser una condición indispensable antes de plantearse la posibilidad de soltar ejemplares procedentes del principal núcleo lincero de Andalucía.

- Apresurar la ejecución estudio y mejora de las áreas seleccionadas para la reintroducción de la especie para adelantar su suelta con plenas garantías de supervivencia.

- Ofrecer a las CC AA la posibilidad, en una situación de seguridad razonable, de reintroducir el lince en terrenos adscritos a convenios voluntarios de gestión y con unas condiciones de hábitats y alimento contrastadas científicamente. En este sentido, echamos en falta una mayor implicación de los gestores ambientales de otras CC AA como Castilla-La Mancha, Castilla y León y Comunidad de Madrid -Extremadura ya ha iniciado los estudios previos para futuras reintroducciones- que parecen hacer oídos sordos a las posibilidades de recuperación en su territorio del felino más amenazado del planeta.