Ante la locura de proyectos para llenar de diques todos los barrancos de la Alpujarra, que pretende al Confederación Hidrográfica del Sur, hemos solicitado a la Delegación Provincial de Medio Ambiente que, en aplicación de la Ley 7/1994 de Protección Ambiental, impida la construcción de las pistas necesarias para acceder a los barrancos casi vírgenes que se piensa destrozar.

Estos proyectos de la CHS tienen el objetivo de retener las tierras que arrastra el agua en épocas de lluvias, y así retrasar un poco la colmatación de la presa de Rules.

Nos parece una indecencia la postura de la CHS de utilizar fondos FEDER de la Unión Europea para acabar con todos los barrancos de la Alpujarra, a base de diques de hormigón, y sin embargo no utiliza ni un euro en la reforestación de cuencas – a lo que está obligado- que a la postre es lo más efectivo y duradero para frenar la erosión.

Esta es una muestra más de las «excelencias» de la Presa de Rules y sus «beneficios» sociales que tenemos que añadir a la regeneración de playas y la futura salinización de los acuíferos costeros.

Todas las obras que pretende realizar la Confederación Hidrográfica del Sur han salido directamente a licitación, no existe ningún estudio ambiental previo, ni ha habido exposición pública de ninguno de los proyectos, a pesar de que muchos superan el millón de euros de presupuesto.

Ante la amenaza de destrozo total de la Alpujarra, no sólo por los cientos de diques que están previstos, sino también por los enormes movimientos de tierras que habría que hacer para facilitar el acceso de la maquinaria pesada a los barrancos, es por lo que pedimos a las autoridades ambientales andaluzas que ellos sí intervengan para proteger el medio ambiente, a la vista de que el Ministerio, que se debería ocupar de la protección natural, está más ocupado en llenar de hormigón los espacios más emblemáticos de nuestra tierra que en una labor medioambiental sostenible.