Ecologistas en Acción de Andalucía denuncia la contribución de la Consejería de Medio Ambiente al ‘lavado verde» que se le pretende dar a la caza, con dos ejemplos significativos: la entrega del Premio de Medio Ambiente de Andalucía a Aproca y el continuado patrocinio de Intercaza que ahora abre sus puertas en Córdoba.

Premio de Medio Ambiente de Andalucía a Aproca (propietarios fincas de caza)

Ecologistas en Acción de Andalucía manifiesta su total disconformidad con la entrega del Premio de Medio Ambiente de Andalucía a Aproca, una asociación que se ha caracterizado en multitud de foros en los últimos años por intentar convertir la “producción de especies cinegéticas” en una actividad ganadera más, con una concepción de la propiedad acaparadora y totalitaria, desprovista de toda función social, que legitima al propietario de una finca la propiedad de todo lo que ésta contiene (incluidas las especies silvestres, tanto cinegéticas como no cinegéticas) y por tanto, que pueda disponer de ello como le venga en gana.

De esta forma, han demostrado su radical oposición a la intervención de la Administración Pública en todo lo que afecte a la caza y a su actividad empresarial, recordando la oposición a la regulación de las cercas cinegéticas, el control de los depredadores o la prohibición de plomo en la munición para las zonas húmedas, entre otros muchos ejemplos.

Este premio es un insulto a los que trabajan en la defensa del medio ambiente y a toda la sociedad andaluza que mayoritariamente rechaza la caza.

Intercaza 2008

Una vez más, desde Ecologistas en Acción de Andalucía denunciamos el apoyo decidido de las administraciones, entre ellas la propia Consejería de Medio Ambiente, con el patrocinio de la feria de muestras que ahora comienza en Córdoba, y que sigue intentando pintar de verde al sector cinegético, utilizando al rifle como pincel.

Entendemos que las administraciones debieran primar su atención en dar respuesta a los problemas ambientales, velar por los derechos de los no cazadores, que suponen más del 96% de la población española, y marcarse como objetivo la utilización del medio natural de forma pacífica y respetuosa.

La caza no podrá colocarse la etiqueta moral de sostenibilidad, a pesar de la estrategia cosmética que les permita adoptar una apariencia de respeto ecológico con el apoyo de la administración. Si la Consejería de medio Ambiente sigue apostando por la caza y no por la conservación y uso sostenible de las especies silvestres, propondremos que le cambien el nombre, y pase a ser “Consejería de caza y exterminio de la fauna silvestre”