Ecologistas, vecinos y profesores de la Universidad de León alegan en contra de la construcción de un teleférico entre Vegacervera y las Cuevas de Valporquero, por los daños irreparables que causará al paisaje y al patrimonio natural, atractivos turísticos que, para que sigan siéndolo, hay que preservar y no destruir.

El proyecto carece de justificación. Se rechaza la alternativa cero, apelando al “mal estado de la carretera”, lo que demuestra el escaso rigor y credibilidad de la documentación presentada, pues recientemente se han ejecutado importantes obras de acondicionamiento que mejoran sustancialmente el acceso de vehículos (ampliación de la calzada, eliminación de curvas, nuevo puente que evita la travesía de Fermín….) de tal forma que en la actualidad se tardan 15 minutos en llegar de Vegacervera al aparcamiento de Valporquero.

Incompatibilidad con la legislación que protege los Espacios Naturales. El trazado del teleférico se localiza dentro de la RED NATURA 2000 (Lugar de Interés Comunitario -LIC “Hoces de Vegacervera”); en la zona “Los Argüellos” declarada RESERVA DE LA BIOSFERA, y dentro del ESPACIO NATURAL “HOCES DE VEGACERVERA” declarado por Decreto 94/2004 de la Junta de Castilla y León. Tanto las Hoces, como la Cueva de Valporquero, y sus entornos, han sido incluidos este año en el INVENTARIO PROVINCIAL DE PUNTOS DE INTERÉS GEOLÓGICO a efectos de su futura protección.

¿Dispone la Junta de Castilla y León o la Diputación Provincial de algún estudio en el que se determine la capacidad de acogida de esos entornos tan frágiles? ¿Cómo va a afectarles los incrementos de visitantes previstos? Esos estudios deberían ser previos a cualquier proyecto “activador turístico”.

Inviabilidad paisajística y ambiental. El impacto visual y paisajístico es elevadísimo y al mismo tiempo inevitable. La instalación de torres de gran porte, los cables, el movimiento incesante de la cabina en ambas direcciones y el trazado de 2,5 Km hasta Valporquero, arruinarán el paisaje de algunos de los parajes más bellos y visitados de nuestra provincia: las Hoces de Vegacervera , las Cuevas de Valporquero, (y sus entornos) verdaderos símbolos de la Montaña Leonesa.

La flora y fauna se verán amenazadas. Aludiendo tan solo a la deforestación que sufrirá el Hayedo de Valporquero, -de enorme valor ecológico y uno de los mejor conservados de toda la provincia-; hay que decir que esta zona boscosa acoge especies protegidas en vías de extinción (águila perdicera, águila real,…) estando incluído en el Corredor Interpoblacional, para la recuperación del Oso Pardo.

Inviabilidad económica SemSA cifra en 8 millones la construcción del teleférico. A esta cantidad habría que añadir el coste de los accesos, aparcamientos y servicios de luz, agua, saneamienteo, etc. para la cafetería y tienda de souvenirs de la parada intermedia, situada en lo alto de la montaña. Según los cálculos de la constructora la inversión total se puede amortizar en 20 años, eso siempre y cuando utilice el teleférico el 100% de los visitantes de la Cueva, y 7000 más, que según sus previsiones acudirán por el efecto llamada de la infraestructura. Esto es sencillamente imposible: Habiendo una carretera segura, la mayoría (grupos familiares, excursiones programadas de escolares y jubilados) seguirá prefiriendo subir en el propio vehículo, en vez de pagar más de seis € por cada ocupante del teleférico. La inviabilidad económica del proyecto presentado por SemSA es de una evidencia bochornosa.

Inviabilidad social: prioridad insensata frente a carencias básicas. El costoso mantenimiento del teleférico, acaparará fondos públicos que se detraerán de necesidades básicas que aún no están cubiertas ni en Vegacervera ni en otros municipios de la provincia de León. Por ejemplo la depuración de las aguas residuales, -que en Vegacervera, se siguen vertiendo a una fosa séptica insuficiente y obsoleta, es decir sin garantizar la calidad de las aguas del efluente, ya que además, el Ayuntamiento lleva años sin renovar su autorización de vertidos y sin solicitar análisis que permitan conocer el efecto sobre el río Torio y sus ecosistemas-. O la falta de planeamiento urbanístico general, situación frecuente en pueblos pequeños, pero inconcebible, -diez años después de la entrada en vigor de la Ley de Urbanismo de C y L-, en un municipio en expansión, que acoge eventos multitudinarios.

A pesar de todo esto, inconcebiblemente, el proyecto cuenta con una partida de 5 millones de € derivada de los fondos europeos Miner, lo cual solo puede calificarse de absurdo despilfarro destructivo a mayor beneficio de la constructora adjudicataria.

Frente a la sinrazón institucional seguiremos exigiendo la protección del espacio natural que se piensa alterar cuyo valor es incalculable. El beneficio socioeconómico a medio y largo plazo se conseguirá potenciando un turismo rural y de montaña respetuoso con la naturaleza – no destruyéndola-.