Ecologistas en Acción de Andalucía sigue insistiendo en el daño que hace la campaña demagógica de la Iglesia Católica a la conservación de la biodiversidad, que tanto trabajo y esfuerzo ha costado a toda la sociedad española.

Aunque en los carteles aparezca la foto de un lince boreal, especie no presente en España, Ecologistas en Acción de Andalucía entiende que el comparar personas con animales, de forma malintencionada y demagógica, solo pretende despreciar los esfuerzos que toda la sociedad está haciendo para defender la biodiversidad y así garantizar un medio ambiente saludable a las personas y a las generaciones venideras.

Consideramos que los problemas de conservación de las especies salvajes son una consecuencia humana, originada por las políticas nefastas de explotación y saqueo a las que estamos sometiendo al planeta Tierra, políticas que están condenando además a millones de personas, niños/as a la más absoluta miseria y degradación de la dignidad humana: hambre, guerras, exterminios….
Además, poner en la misma balanza lo que le puede ocurrir a una especie con lo que le puede ocurrir a un individuo, carece de fundamento biológico y de conocimiento científico.

La estrategia de comparar personas con animales para eximir el respeto a estos últimos no es nueva, ya que los defensores de las ‘fiestas» con maltrato animal como diversión ya la vienen utilizando desde hace años.

La campaña de la Iglesia Católica lo único que está consiguiendo es disminuir de forma intencionada la sensibilidad ambiental de una sociedad cada vez más preocupada por la pérdida de biodiversidad, no aportando nada a la verdadera intención de la Iglesia Católica en su campaña antiabortista.

Por esto pedimos respetuosamente a la Conferencia Episcopal que retire esa manipuladora campaña por el descrédito al que se va a autosometer ante la opinión pública y por el daño que le va a producir a ese pobre animal, que simplemente es una victima más, situada en el borde del precipicio y a punto de extinguirse de este maravilloso planeta, nuestra casa común y la de todos los seres vivos.