En los últimos dos años, el Ayuntamiento de Calahorra, gobernado por el partido popular ha realizado varias actuaciones, cuyo resultado final ha sido la desaparición de centenares de árboles dentro del casco urbano.

La primera de estas actuaciones sucedió en el transcurso del mes de mayo de 2007, en que varios ejemplares de ciprés de macrocarpa, con más de veinte años de edad, fueron talados en las piscinas municipales para construir unas pistas deportivas para la práctica del pádel.

Con posterioridad fueron cortados más de medio centenar de álamos boleana, en los patios de los colegios públicos Aurelio Prudencio y Marco Fabio Quintiliano. En esta ocasión, el motivo que se alegó desde el Ayuntamiento de Calahorra fue la construcción, dentro de los patios de los colegios, de unos nuevos módulos para educación primaria.

En otra ocasión, y en el transcurso de las obras de urbanización del sector Cidacos, la empresa Lázaro Conextran (de Logroño) arrasó cuatro hectáreas y media de soto, de las cuales dos y media se encontraban pobladas de árboles y arbustos autóctonos de diferentes especies.

Se calcula que más de mil ejemplares fueron arrancados, algunos con más de cuarenta años de edad.

El ayuntamiento alegó que no era su intención eliminar dicho bosque, (que tendría que haberse convertido en una prolongación del Parque del Cidacos) , y le echó la culpa a la empresa, que por la ausencia de su encargada, el operario que manejaba el bulldozer acabó por destruir todo el soto.

La verdad parece ser otra. En cualquier caso, desde el Ayuntamiento existió una clara falta de atención en este tema, y una dejación de su misión de vigilancia y supervisión de las obras. El resultado final ha sido la desaparición por completo del bosque natural que existía en esa zona. De momento la empresa no ha subsanado en modo alguno el desastre preparado, ni parece que tengan intención de hacerlo.

Y hace dos semanas fueron arrancados y trasplantados los árboles del parque del Cidacos, en una operación extemporánea que nos augura que los mismos no sobrevivirán y pasaran a alargar la negra listas de árboles arrasados por el Ayuntamiento de Calahorra.

Y por si esto no fuera ya suficiente esta pasada semana una treintena de chopos con más de treinta años de antigüedad han sido arrancados de cuajo nuevamente en el complejo polideportivo municipal de La Planilla, en esta ocasión con el pretexto de construir un frontón. Una infraestructura que ya estaba hecha, y que lejos de aprovecharla se ha demolido en lo que ha sido un ejemplo de despilfarro intolerable de los recursos y dineros de los ciudadanos. Un frontón que se podía haber aprovechado, cubriéndolo y dotándolo de gradas, sin necesidad alguna de demolerlo ni de acabar con los árboles existentes.

Desde Ecologistas en Acción queremos mostrar nuestra más enérgica repulsa ante estos actos de vandalismo arboricida que cada poco tiempo perpetra el Ayuntamiento de Calahorra, y lamentar que al paso que vamos en breve no va a quedar ni un árbol en pie dentro del casco urbano de Calahorra.

En todo el planeta se considera la plantación de árboles como una de las medidas mas efectivas para educar a las generaciones futuras en el respeto al medioambiente, y de un tiempo a esta parte también para combatir el efecto invernadero; en todo el planeta menos en Calahorra, donde se destruyen. Que buen ejemplo de educación ambiental y de protección de la naturaleza. La verdad es que van a contramano y totalmente desfasados con los tiempos que corren.