Peticiones al Ministerio de Medio Ambiente de la Coordinadora Estatal de Plataformas contra la Incineración de Residuos

La Coordinadora Estatal de Plataformas contra la Incineración de Residuos ha remitido al Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino (MMARM), sus peticiones sobre la utilización de residuos como combustible en los hornos de cemento, una iniciativa que pretende acabar con la disparidad de criterios existente en la actualidad en las distintas Comunidades Autónomas.

La Coordinadora Estatal considera que una regulación más estricta y un control exhaustivo sería la mejor solución a los problemas ambientales que genera la combustión de residuos en cementeras, dado que muchos de los residuos que se están utilizando (neumáticos, disolventes, lodos de depuradora, harinas cárnicas, residuos industriales, etc.) con el beneplácito de la administración estatal y autonómica, provocan graves impactos ambientales y a la salud, además de quemar valiosos materiales que se podrían reutilizar o reciclar. Hay que tener en cuenta también la repercusión que la incineración de residuos tiene en la Agricultura, la Ganadería y por consiguiente, en la Alimentación.

Estas son las peticiones en cuanto a la utilización de residuos como combustible en los hornos de cemento:

El MMARM debe velar por el cumplimiento del principio de jerarquía en la gestión de residuos. Recordamos que la ley impone el siguiente orden de prioridades: prevención o reducción, reutilización, reciclaje, valorización energética y finalmente eliminación. Por lo tanto se debería exigir que el combustible derivado de residuos no incluya ningún residuo que técnicamente pueda reutilizarse o reciclarse.

Debe articularse una efectiva coordinación entre las distintas administraciones estatales y autonómicas y deben definirse prioridades y actuaciones concretas comunes para garantizar dicha jerarquía en el marco de las Conferencias Sectoriales, que hagan económicamente viables las posibilidades técnicas existentes de reutilización y reciclaje de residuos.

Deben establecerse medidas para que las Autorizaciones Ambientales Integradas no puedan defraudar los distintos Planes Públicos de Gestión de Residuos. En la práctica, los permisos otorgados a las cementeras defraudan estos planes y las convierten en gestoras privadas de valorización. De este modo entran en competencia desleal y hacen económicamente inviable cualquier otra forma de gestión de residuos que opte por la reutilización o el reciclaje.

Los requisitos ambientales para los hornos cementeros son más permisivos que para las incineradoras de residuos. La combustión de residuos provoca la emisión a la atmósfera de sustancias de alta toxicidad para la salud, como dioxinas y furanos, y algunas sin ningún límite legal de emisión establecido, como algunos Compuestos Orgánicos Persistentes, reconocidos como extremadamente tóxicos incluso en concentraciones ínfimas.